La presidente del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni
Los anarquistas italianos le declaran la guerra a Meloni para liberar al terrorista Alfredo Cospito
El anarquismo italiano ha declarado la guerra al gobierno de Giorgia Meloni por el encarcelamiento en régimen severo del terrorista Alfredo Cospito.
Cospito, condenado por un atentado cometido en 2006 contra un academia de los Carabinieri, lleva en huelga de hambre desde hace 103 días en una cárcel de Sassari, Cerdeña.
El terrorista anarquista exige que se le levante la condena a prisión en régimen severo, una fórmula incluida en el artículo 41 bis del código penal italiano, pensado para casos de terrorismo y violencia mafiosa.
Él defiende que se trató de un atentado reivindicativo, sin intención de causar muertes, y que, de hecho, no hubo ni muertos ni heridos. También afirma que la intención de su huelga de hambre no es que lo liberen, sino que lo ingresen en una cárcel en un régimen convencional.
Por el momento, las autoridades italianas han decidido trasladar a Cospito a Milán para recibir una mejor atención médica que en Cerdeña.
El empeoramiento de la salud del terrorista anarquista incendió las calles de Roma y de otras ciudades italianas.
En el barrio romano del Trastevere, grupos anarquistas causaron graves disturbios y enfrentamientos violentos contra la policía. Los anarquistas lanzaron cócteles Molotov contra una comisaría y causaron heridas a un agente. Hay 40 detenidos.
También en las ciudades de Milán y Turín se han producido disturbios violentos. Fuera de Italia, Berlín y Barcelona han registrado protestas violentas por parte de grupos anarquistas que exigen la liberación del anarquista italiano.
Tras los incidentes el ministerio de Justicia difundió un comunicado en el que recuerda «las razones que han llevado a la autoridad judicial a proponer y confirmar el régimen carcelario derivado del artículo 41 bis que se le ha impuesto a Alfredo Cospito».
Afirma que el ministerio «se hace cargo de las condiciones de salud del detenido, por lo que ha dispuesto su traslado, siempre en régimen 41 bis, al instituto penitenciario de Opera (en Milán), dotado de las adecuadas infraestructuras sanitarias».
El ministerio del Interior, por su parte, anunció medidas extraordinarias para contener «los numerosos episodios de actos vandálicos o incendiarios, y de manifestaciones callejeras violentas».
Sobre la pretensión de los anarquistas de liberar a Cospito por motivos de salud, el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, declaró en rueda de prensa que «la amenaza del suicidio en la cárcel o de dejarse morir de hambre no debe imponerse sobre los principios democráticos sobre el tratamiento penal establecido en los procesos».
«En la Constitución no está escrito que la huelga de hambre pueda alterar el sistema de funcionamiento de la democracia», insistió.
En ese sentido, el gobierno italiano encabezado por Giorgia Meloni descartó cualquier «pacto con quien emplea la violencia y la amenaza como instrumento de lucha política».
La presidente del consejo de ministros italiano trató de ser todavía más contundente durante unas declaraciones a la prensa: «El Estado no debe dejarse intimidar por quienes piensan en amenazar a sus funcionarios».
En el seno de Fratelli d’Italia, partido mayoritario en el gobierno, la oposición a cualquier relajación en el régimen carcelario de Cospito es absoluta: «Cospito es un terrorista y lo reivindicaba con orgullo en la cárcel», aseguró el diputado Giovanni Donzelli en una intervención ante la Cámara.
¿Quién es Alfredo Cospito?
Alfredo Cospito, el terrorista anarquista que pretende desafiar al gobierno de Giorgia Meloni, nació en 1967 en Pescara.
Residente en el barrio de San Salvario de Turín, Cospito es, según la agencia ANSA, uno de los elementos más prominentes del submundo anarquista de Turín.
Su actividad subversiva anarquista se remonta al año 1996. Desde las páginas del libelo anarquista Kn03 –fórmula química del nitrato de potasio empleado para fabricar explosivos– hizo apología del terrorismo hasta que dejó de editarse en 2008.
Con ese mismo nombre, Kn03, fundó un grupo anarquista junto con Anna Beniamino, también encarcelada en la prisión romana de Rebibbia, que posteriormente se incorporó al grupo internacional de la FAI (Federación Anarquista Italiana).
Encarcelado por el atentado contra el administrador delegado de la empresa Ansaldo Nucleare, Roberto Adinolfi, en 2012 –herido de bala en ambas piernas–, quedó en libertad en 2020.
Fue condenado de nuevo por el atentado cometido en 2006 contra la academia de los Carabinieri en Fossano. El tribunal lo condenó a 20 años de cárcel tras quedar demostrado que Cospito colocó dos artefactos explosivos en las taquillas al ingreso del establecimiento. La explosión no causó ni muertos ni heridos.
La corte concluyó que ese atentado fue un ataque contra la seguridad del Estado y lo condenó al régimen de prisión más estricto, que lo priva de varios beneficios carcelarios, en virtud del artículo 41 bis del código penal italiano.
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