Tailandia acusa a Camboya de quebrantar «de manera deliberada» el alto el fuego acordado entre ambos gobiernos
Tailandia y Camboya reanudan los combates fronterizos pese al anuncio de alto el fuego impulsado por Trump
En octubre, el dirigente estadounidense presidió en Kuala Lumpur la firma de los acuerdos de paz que ahora vuelven a quedar en entredicho
Los Ejércitos de Tailandia y Camboya mantienen este sábado enfrentamientos armados en varios puntos de su frontera común, a pesar de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara el viernes que ambos países habían acordado detener «todos los disparos» de forma inmediata.
Bangkok y Nom Pen se han acusado mutuamente de continuar las hostilidades, que incluyen el uso de cohetes, aeronaves y ataques contra infraestructuras, lo que ha provocado un nuevo aumento del número de evacuados. Estas nuevas salidas forzosas se suman a los más de medio millón de desplazados desde el pasado domingo, cuando comenzaron los choques a lo largo de los 820 kilómetros de frontera que separan a ambos países.
Trump informó del supuesto acuerdo a través de su red social Truth Social, tras mantener conversaciones con el primer ministro tailandés, Anutin Charnvirakul, y con el jefe del Gobierno camboyano, Hun Manet. Según el mandatario estadounidense, ambos líderes se comprometieron a «regresar al acuerdo de paz» firmado en octubre pasado en Kuala Lumpur, un proceso en el que él mismo actuó como mediador.
El anuncio se produjo en un contexto de recrudecimiento de la violencia, que deja hasta el momento un saldo preliminar de 26 muertos y más de 200 heridos en ambos lados de la frontera.
Sin embargo, Anutin afirmó este sábado, en un mensaje publicado en Facebook, que Tailandia continuará con sus acciones militares mientras no perciba «más daños ni amenazas» por parte de Camboya, a la que acusa de haber roto el acuerdo de paz al supuestamente colocar nuevas minas antipersona en la zona fronteriza.
«Debe quedar claro al mundo que Camboya cesará el fuego, retirará sus fuerzas y eliminará todos los artefactos explosivos que se han colocado. Si esto se hace y se puede demostrar, Tailandia nunca ha pretendido arrebatarles nada. Pero primero deben detenerlo todo», declaró el dirigente ante los periodistas.
Por su parte, Camboya acusó a Tailandia de ampliar este sábado sus ataques hacia la provincia de Koh Kong, en el suroeste del país, lo que habría provocado el desplazamiento de cientos de personas en busca de refugio. Las imágenes de estas evacuaciones han sido difundidas en redes sociales.
El Ministerio de Defensa camboyano denunció que, tras el anuncio de Trump, Tailandia ha empleado aviones de combate, ha atacado puentes, destruido infraestructuras y disparado de forma reiterada contra poblaciones civiles.
Tailandia y Camboya mantienen una histórica disputa territorial por varias zonas fronterizas cuya delimitación se remonta a 1907, cuando Camboya formaba parte de la Indochina francesa.
Trump ya intervino como mediador el pasado julio, cuando varios días de enfrentamientos dejaron medio centenar de muertos. En aquella ocasión, reveló que ambos países accedieron a detener los combates tras ser amenazados con represalias comerciales. En octubre, el dirigente estadounidense presidió en Kuala Lumpur la firma de los acuerdos de paz que ahora vuelven a quedar en entredicho.