La autopista en cuestión funciona con pórticos lectores de matrículas
Pago por uso
La nueva autopista española de peaje en la que te multan si circulas sin darte de alta
Esta carretera anticipa el funcionamiento de las autopistas de peaje que llegarán a todo el territorio nacional en 2024
Los peajes se convirtieron en uno de los temas más polémicos de las pasadas elecciones. Inicialmente confirmados por la DGT a través de su director general, Pere Navarro, su puesta en funcionamiento fue desmentido por el Gobierno en pleno, incluido el mismo Pedro Sánchez.
Finalmente la Unión Europea confirmó, a pregunta de este periódico, que formaban parte del compromiso asumido por España para recibir los fondos Next Generation, lo que zanjó la duda y confirmó definitivamente su puesta en funcionamiento.
Quién contamina paga
Estos peajes forman parte de la filosofía pago por uso o quién contamina paga, lemas con los que se justifica su puesta en funcionamiento a nivel nacional.
Los tradicionales peajes de garita desaparecen progresivamente
Pero el problema de los peajes va mucho más allá. Sólo puede poner en funcionamiento un peaje quién ostenta la titularidad de una carretera, lo que supone que el Estado español no puede poner en marcha peajes en gran parte de la red viaria nacional, pues su titularidad está transferida a las comunidades autónomas.
Esto va a provocar un conflicto de intereses en 2024 cuando sea obligada su activación, lo que va a obligar a llegar un gran pacto nacional, tal y como anticipó el propio Pere Navarro.
El Gobierno no puede poner peajes
A día de hoy no debemos confundir los peajes que están vigentes en algunas carreteras estatales, y que se han reducido de forma drástica en los últimos años, con los nuevos peajes de pago por uso.
Los primeros funcionan bajo un régimen de concesión, la empresa adjudicataria de la obra recibe además los derechos de explotación durante 20 ó 25 años y son precisamente estos los que han ido decayendo recientemente. Funcionan bajo sistema de cabinas y a día de hoy son los siguientes.
PEajes estatales vigentes en la actualidad
- Autopista AP-66, Campomanes-León
- Autopista AP-46, Alto de las Pedrizas - Málaga
- Autopista AP-51, AP-6, conexión con Ávila
- Autopista AP-53, Santiago de Compostela - Alto de S. Domingo
- Autopista AP-6, Villalba - Villacastín - Adanero
- Autopista AP-61, AP-6, conexión con Segovia
- Autopista AP-66, Campomanes - León
- Autopista AP-7, Alicante - Cartagena
- Autopista AP-7, Estepona - Guadiaro
- Autopista AP-7, Málaga - Estepona
- Autopista AP-71, León - Astorga
- Autopista AP-9, Ferrol - Frontera portuguesa
- Autopista AP-68, Bilbao - Zaragoza
Estos no tienen nada que ver con los nuevos peajes free flow que o dinámicos de pago por kilómetro, que ya están en funcionamiento en alguna autopista española. En concreto, el País Vasco lo activó el año pasado en la A-636 entre Beasain y Bergara.
El único peaje de pago por kilómetro
Conocida como autovía de Deskarga, tiene una longitud de 22,9 kilómetros. Incluye tres túneles (1,95 kilómetros) y 12 viaductos (12 kilómetros) y soporta un tráfico diario en torno a los 18.982 vehículos.
Trazado de peaje de la A-636
Al tratarse de un peaje dinámico no disponemos de cabinas de pago como tal, sino que hay pórticos lectores de matrículas que identifica a los vehículos que circulan por ella y les cobra el importe total, hasta un máximo de 2,53 euros en el caso de los coches (4,11 para camiones ligeros y 5,15 para camiones de más de 12 toneladas).
Menos de tres euros
Para el pago podemos recurrir a sistemas como los dispositivos TAG o al Abiatu vasco anual, aunque si no disponemos de ninguno de ellos debemos darnos de alta en una web con la matrícula del coche.
En caso contrario recibiremos en casa una multa de 100 euros más el pago correspondiente por el peaje que no hemos abonado.
Así funcionan los pórticos de lectura
Todo parece indicar que este mismo sistema será el utilizado en el resto de España cuando se pongan en funcionamiento los peajes de 2024.
