Imagen de la agresión del conductor del coche
Suceso
Un motorista bloquea una calle con su moto y un conductor le patea la cabeza mientras se hace el muerto
La Policía ya analiza los hechos ocurridos en Córdoba y ha abierto una investigación para descubrir lo que pudo ocurrir entre estos dos conductores
Lo que pasa en las calles se queda en las calles, o al menos eso debía pensar el conductor de este vetusto Citroën Xsara cuando decidió tomarse la justicia por su mano con el conductor de un scooter que sin que sepamos muy bien por qué decide cruzar su moto en la calle e interrumpir el tráfico.
El vídeo que ha volado en redes sociales y dura cari 3 minutos muestra un suceso extremadamente violento en el que se ve básicamente lo que jamás hay que hacer a los mandos de una moto ni de un coche.
Jamás de los jamases
En este caso el ciudadano que parece ser de Marruecos por el acento se para en mitad de la calzada interrumpiendo el tráfico cuando un conductor de coche decide increparle de manera bastante violenta, una pena que teniendo toda la razón la pierda por las formas, pues no son asumibles bajo ningún concepto.
Motorista y conductor en pleno intercambio de golpes
La secuencia incluye un intercambio de golpes bastante absurdo, pues el motorista lleva el casco puesto, a lo que sigue que el conductor decide tirar la motocicleta al suelo provocándole daños, por lo que mientras este aprovecha para llamar a la Policía para que levante acta de lo sucedido, el conductor del coche decide pasarle a la moto por encima con su vehículo.
Agresión en toda regla
Con el motorista en el suelo fingiendo estar herido, el conductor concluye la acción con una patada en la cabeza del mismo, que afortunadamente mantenía el casco puesto. Un ejemplo de hasta que punto la imbecilidad y el sinsentido pueden provocar un problema muy serio en carretera y arruinar la vida de dos personas.
La moto en el suelo tras el atropello
De acuerdo con testigos presenciales los hecho ocurrieron en Córdoba a plena luz del día y afortunadamente la intervención de los vecinos ayudó a separarlos.
La grabación demuestra con claridad la agresividad del conductor, que va a tener que hacer frente a una denuncia y a un juicio con toda seguridad y cómo el motorista finge estar herido y se tira al suelo.
