Desastres naturales
Han pasado varios días, y la persona que vio y olió ha podido volver, pues su vivienda no se quemó, fue afortunada, pero sigue sin oír y ver al alcalde en rueda de prensa, con otros naturalmente, para saber las posibles causas, qué consecuencias ha habido y qué medidas de futuro se van a tomar
Un incendio es algo muy difícil de predecir, pero si se pueden amortiguar sus efectos con labores de limpieza y obras adecuadas de infraestructura, evaluar su probabilidad y comunicar eficazmente cuando se desencadena. Nada de esto se ha producido en Tres Cantos, a pesar de que hace un año hubo otro incendio en el monte que estuvo a punto de llegar, en este caso, a las viviendas del 'nuevo Tres Cantos'.
Una tarde de un fin de semana en la primavera de 1985, en Lawton, Oklahoma, pueblo cercano a la base artillera de Fort Sill del US Army, donde el que suscribe se encontraba realizando un curso. Estoy viendo la televisión y de repente se interrumpe la programación y suena un sonido grave estridente e intermitente que se oye en toda la casa. En una franja que se desplaza en la parte inferior de la pantalla se puede leer: Tornado Watch in Effect en una serie de counties, incluyendo al que pertenecía Lawton, con franja horaria posible, dirección estimada y medidas a tomar. Similar sonido se emite en todas las radios. No se había producido todavía el tornado, pero se predecía con satélites y radares de superficie. No era un Tornado Warning in Effect, (otro tipo de aviso) es decir, un tornado que ya ha sido localizado y se sigue su trayectoria, situación más grave, con medidas urgentes a tomar. Así se predecían, avisaban y seguían los tornados en USA hace 50 años. Este sistema de avisos se extendía a las tormentas, inundaciones, incendios y huracanes.
Tres Cantos, 11 de agosto de 2025 sobre las 19:15 horas. No ha habido antes alarmas en móvil de aviso de probabilidad de incendio. En Soto de Viñuelas, alguien ve briznas quemadas y nota olor a quemado en jardín de casa, los vecinos salen a la calle, «fuego en el monte, muy cerca, hay que irse». Sigue sin haber alarmas de incendio en los móviles. Los vecinos abandonan las casas sin medidas claras de qué hacer ni donde ir. Lo demás ya lo saben. Es milagroso que solo hubiera un fallecido, D.E.P, y un herido grave. Aquí entra la labor insuperable, como siempre, de los bomberos, la Guardia Civil y la UME.
Los americanos podían predecir tornados hace 40 años, antes de ocurrir, y comunicarlo eficazmente. Nosotros no podemos predecir tormentas eléctricas secas y combinarlo con parámetros como intensidad y velocidad del viento, temperatura, estado de la vegetación, antecedentes en la zona, etc., y elaborar una predicción. Y lo que es más grave, no lo comunicamos digitalmente una vez producido, para que esa persona que no se ha enterado reciba una alarma sonora en el móvil para que abandone su domicilio ASAP, con medidas a tomar y lugar al que dirigirse.
Segunda parte. En el país arriba mencionado, en un desastre o calamidad que requiere medidas de emergencia con implicación de organismos federales, como el caso de Tres Cantos, con intervención de la UME; a las pocas horas, hay declaración pública seguida de rueda de prensa presidida por alcalde, jefe de policía local y representantes de organismos del Estado y agencias federales que han intervenido con toda clase de preguntas libres de los periodistas. Han pasado varios días, y la persona que vio y olió ha podido volver, pues su vivienda no se quemó, fue afortunada, pero sigue sin oír y ver al alcalde en rueda de prensa, con otros naturalmente, para saber las posibles causas, qué consecuencias ha habido y qué medidas de futuro se van a tomar.
Un conocido periodista, vecino de Tres Cantos, explicaba perfectamente en un artículo publicado por este periódico las recomendaciones de un experto para tomar medidas por la situación preocupante de la vegetación en proximidad a Soto de Viñuelas, que predecía un desastre de esta naturaleza. Al parecer, esta situación con las recomendaciones fueron transmitidas incluso al concejal competente. Que se sepa, nada se hizo. O quizás sí, no lo sabemos, al no haber habido la referida rueda de prensa.
Cada año es más caluroso, cada julio, cada agosto, lo mismo. España es país de veranos tórridos proclive a incendios, gotas frías, danas, etc., donde este calentamiento ha tenido y tiene un efecto superior. Después de los veranos llegan las grandes tormentas con efectos imprevisibles. Es necesario un Centro de Predicción Nacional de Catástrofes, 24/7, exclusivo para la predicción, con medios aéreos no tripulados (UAVs) de vigilancia y observación, con radares de superficie, con capacidad para gestionar aplicaciones para la comunicación de desastres antes y en el momento de producirse etc. etc. El Cenem (Centro Nacional de Seguimiento y Coordinación de Emergencias) es más un centro de coordinación de la ejecución de medidas una vez producido el desastre. La Aemet no es un centro de predicción. Está en juego la vida de las personas, sus enseres, nuestra tierra. Y un mensaje final a los políticos que legislan, gestionan y son responsables, por favor, alejen de este tema la lucha política y la cuestión ideológica.
Carlos Alonso Ausin es coronel retirado y exfuncionario de NNUU en Nueva York