Padres de algunos de los alumnos secuestrados en Nigeria
«Algunos niños se caían y los hombres les daban patadas»: el horror de los menores secuestrados en Nigeria
Los familiares muestran su impotencia y desesperación tras el secuestro de 300 alumnos internos de un internado católico: «Vi como se llevaron a mi hijo a punta de pistola»
Desolación, desesperanza, impotencia, rabia, angustia. Los familiares de los más de 300 menores secuestrados en la escuela St. Mary's, en la aldea de Papiri, en el estado de Níger (Nigeria), no encuentran las palabras para definir su estado de ánimo después de que un grupo terrorista yihadista secuestrara a 303 estudiantes y 12 trabajadores en el internado católico hace unos días.
La BBC recoge el testimonio de Theo, el padre de uno de los menores, que el pasado viernes se despertó de madrugada por el ruido que hicieron los hombres armados al pasar por delante de su casa con los niños. «Los llevaban a pie, como los pastores controlan a sus rebaños. Algunos niños se caían y los hombres les daban patadas y les ordenaban que se levantaran», ha asegurado entre lágrimas. «Los hombres armados iban en unas 50 motocicletas mientras los controlaban», agrega.
«Tenía ganas de ir a ayudar, pero lo pensé mejor. Aunque hubiera ido, ¿qué podía hacer? No podía hacer nada», confiesa impotente, y añade que llamó a la policía, pero que cuando los agentes llegaron ya era demasiado tarde. «Nuestros hijos han sido secuestrados, pero el Gobierno no parece prestarle atención», lamenta el padre. «Hemos llegado a la conclusión de que al Gobierno no le preocupamos; sentimos que no formamos parte del país, que nos han abandonado», añade con frustración.
Tristeza y desolación
El dolor que sienten los padres de los niños que siguen desaparecidos es más que evidente. «Estoy triste, toda mi vida está llena de tristeza», dijo una madre cuyo hijo se encontraba entre los niños secuestrados. «Es mi único hijo, es mi primogénito, ¡por favor, ayúdennos!», suplicó.
La situación ha provocado tal convulsión en el país africano que el presidente de Nigeria, Bola Tinubu, canceló su viaje a la cumbre del G20, celebrada en Sudáfrica el pasado fin de semana, para hacer frente a la crisis. «Quiero dejar claro que no voy a ceder. Todos los nigerianos, en todos los estados, tienen derecho a la seguridad, y bajo mi mandato, vamos a garantizar la seguridad de esta nación y proteger a nuestro pueblo», afirmó Tinubu. Habrá que ver si el mandatario nigeriano es capaz de llevar a cabo su promesa.