Los niños enfermos y las mujeres con sus bebés recién nacidos permanecen en un sótano utilizado como refugio antiaéreo en el hospital infantil de Okhmadet en el centro de Kiev
Sanidad-Ucrania
La OMS denuncia la grave presión a la que está sometida la sanidad ucraniana
Se han confirmado hasta la fecha dieciséis ataques sanitarios en Ucrania
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denunciado este martes que el sistema sanitario de Ucrania se encuentra bajo una «presión grave». Tras estas declaraciones, la Organización reiteró la necesidad de establecer una estructura sostenible de paso seguro para la ayuda humanitaria.
OMS-Europa señaló como principales prioridades asegurar la llegada de material sanitario a Ucrania; que los países vecinos tengan la infraestructura y la competencia necesarias para atender a los desplazados por la guerra, y poder responder a los requerimientos inmediatos dentro del país a través del centro de operaciones establecido en el oeste.
«Hay escasez de medicinas esenciales para salvar vidas como oxígeno e insulina, equipo de protección personal, material quirúrgico, anestesia y productos sanguíneos», señaló en rueda de prensa el director de la oficina regional europea de la OMS, Hans Kluge.
La OMS ha mandado a Ucrania 76 toneladas de suministro de urgencias y de trauma, así como neveras, congeladores y hielo. Además, ya hay más de camino con suministro adicional y 500 concentradores de oxígeno.
OMS-Europa ha asegurado estar respondiendo a las necesidades primarias dentro del país mediante el envío de suministros, programas de capacitación y dotación de personal a través de la movilización de equipos médicos.
Se han confirmado dieciséis ataques sanitarios en Ucrania
Asegurar el tratamiento de personas con necesidades de salud a largo plazo como cáncer o diabetes constituye un «gran reto», explicó Kluge, debido a la ruptura de las líneas de suministro.
La OMS aseguró que se han confirmado dieciséis ataques sanitarios en Ucrania, lo que incluye también episodios de violencia física y psicológica y de obstrucción a su actividad.
Los ataques se han producido en grandes ciudades y en la línea del frente, explicó la responsable de Emergencias de OMS-Europa, Catherine Smallwood, quien no reveló la localización exacta de las instalaciones afectadas aludiendo a motivos de seguridad ni tampoco los autores de las agresiones, pero sí que ha habido 9 muertos y 16 heridos.
«No debería ser necesario decir que los trabajadores sanitarios, hospitales y otras instalaciones médicas nunca deben ser un objetivo, incluso durante crisis y conflictos», afirmó Kluge.
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