El Dr. Pedro Guillén, en un momento de la entrevista
Dr. Pedro Guillén: «Operamos a deportistas de ligamento cruzado y vuelven a entrenar a los 15 días»
A sus 86 años el Dr. Guillén trabaja en la programación de rejuvenecimiento celular
El Dr. Pedro Guillén (Archena, Murcia, 1938) es uno de los mayores especialistas en Medicina y Traumatología del deporte del mundo. Licenciado y doctor por la Universidad Complutense de Madrid, por sus manos han pasado mitos del fútbol como Maradona, Emilio Butragueño o Cristiano Ronaldo. Uno de los últimos en entrar en su quirófano ha sido el futbolista del Real Madrid y de la Selección Española Dani Carvajal. Pero el reputado médico no solo ha operado cientos de rodillas de deportistas de élite, también ha curado a políticos, miembros destacados de la cultura o premios nóveles, además de miles de ciudadanos anónimos.
Entrar a su despacho, en la Clínica CEMTRO de Madrid reconocida por la FIFA como Centro Médico de Excelencia y centro de referencia en las áreas de Ortopedia, Traumatología, Fisioterapia, Medicina Deportiva, Rehabilitación, Podología y Órtesis, es hacerlo a un lugar donde se respira experiencia, investigación y mucho trabajo. «Primero fui anatómico –soy profesor de Anatomía de la Complutense–, pero yo vi el muerto, muy muerto y pasé a la cirugía pero siempre desde la perspectiva de la anatomía y de la investigación» nos explica antes de empezar la entrevista.
Qué es la artroscopia
El Dr. Guillén desempeñó un papel clave en la introducción de la artroscopia en España en 1977. Esta técnica dio paso a una cirugía mínimamente invasiva, con grandes beneficios sobre millones de pacientes en todo el mundo ya que trata las lesiones sin necesidad de abrir la articulación.
«Como traumatólogo, me llamó la atención –explica el Dr. Guillén–, la aparición de esta técnica nueva en 1960 en Japón. El artroscopio permite ver el interior de una articulación. Si esa articulación está colapsada, se rellena de un líquido, se mete una luz y con una lente permite ver lo que hay dentro. Así que traigo la artroscopia a España» y añade: «Empezamos a operar a pacientes que se iban el mismo día de la cirugía, cuando hasta entonces estaban ocho días en el hospital porque abrías la articulación».
El deportista, en su triunfo, debe saber que su vida es corta y por eso hay tanta exigencia en que el tratamiento sea ajustado y precoz
Esta técnica representó una auténtica revolución en el diagnóstico y tratamiento de lesiones articulares. ¿Cómo ha influido esta innovación en la práctica médica? «Con la artroscopia le arreglamos al paciente la articulación y se va a casa el mismo día. A los 15 días va a poder volver al deporte. Eso hizo que, sin yo pretenderlo, empezaran a venir deportistas que entraban y salían en el día. El deporte vino en masa, sobre todo aquellos con lesiones de menisco o ligamento cruzado anterior», explica el Dr. Guillén que, a pesar de ser uno de los mejores cirujanos del mundo en su especialidad, sorprende por su humildad.
Preguntado por cómo sobrelleva la responsabilidad de tener el futuro de una deportista de élite en sus manos, el traumatólogo hace gala de su discreción y afirma: «Una vez que estoy dentro del quirófano da igual como se llame. Solo pienso en resolver el problema médico. Tienes que entregarte a él sin importar de quién se trate. Esa persona necesita tu tiempo, lo demás da lo mismo» y añade con una sonrisa en los labios: «La preocupación viene después, cuando sales y ves tanta prensa».
Artroscopio sin cables
En 2007, el Dr. Pedro Guillén patentó el primer artroscopio sin cables, un dispositivo que consta de una lente convencional a la que se adapta una batería, una luz regulable y una cámara en miniatura que envía la imagen vía WIFI a un receptor portátil. Esto hace que todo el dispositivo necesario para una artroscopia no requiera más que un maletín pequeño, donde llevar el artroscopio, el instrumental y el ordenador. «Fue un paso importante. Por ejemplo, un veterinario que tenga que operar en un establo puede hacerlo en condiciones de poca luz. Otra indicación puede ser en un barco militar o en primera línea de guerra», explica el cirujano.
El Dr. Pedro Guillén, en un momento de la entrevista
Detener el reloj biológico
Además de su labor clínica, el Dr. Pedro Guillén ha participado en investigaciones sobre regeneración muscular y reprogramación celular. «En medicina siempre queda una pata por resolver. Por ejemplo, en un paciente diabético esa pata sería hacer funcionar la célula pancreática que no funciona».
«En el año 2012, el Dr. Shinya Yamanaka, traumatólogo japonés, se fue a investigar a Estados Unidos y consiguió volver joven o embrionaria una célula adulta. Por ese trabajo le otorgan, a los 52 años, el Premio Nobel de Fisiología y Medicina. Había conseguido la reprogramación celular, o lo que es lo mismo, detener el reloj biológico» relata el traumatólogo. Sin embargo, un trabajo posterior de un investigador español demostró que todos los animales a los que se les aplicaba esa molécula desarrollaban algún tipo de cáncer. Las altas dosis tenían la culpa: «Si te doy una aspirina te quita el dolor de cabeza pero si te doy cien te producirá una úlcera de estómago», afirma el científico.
El futuro de la medicina
Un grupo de investigadores, entre los que se encontraba la Fundación Dr. Pedro Guillén, decide ponerse manos a la obra para analizar cuál podría ser la dosis que regenerara las células sin causar enfermedades. «En el año 2016 publicamos un trabajo en la revista Cell, donde aplicando en ratones esa molécula a dosis muy bajas – pulsada y de fines de semana–y se lograba que aquel ratón viejo se convirtiera en joven y no tuviera tumores». «Ahora, la misma revista ha publicado que este trabajo es uno de los más importantes de la última década (del 2014 al 2024)».
El Dr. Pedro Guillén, en un momento de la entrevista
Reprogramación celular en humanos
Hace algo más de dos años, la Fundación Dr. Pedro Guillén llegó a un acuerdo con la empresa Altos Labs, biotecnológica que trabaja en la programación de rejuvenecimiento celular para restaurar la salud y la resiliencia de las células.
¿Cuándo llegará a los humanos el sueño de la eterna juventud? A esta pregunta el doctor nos da solo una pista: «Estamos trabajando en ello, muy pronto podremos contar más cosas». La reprogramación celular en humanos está cada día más cerca.