Un hombre que había sido acusado de acoso sexual a su ex pareja en
Alicante ha decidido cambiarse de sexo, amparado por la
ley trans, para ahora alegar que, entonces, no puede ser ya juzgado por hipotética violencia de género, ya que es una mujer.
La surrealista historia, recogida por medios locales alicantinos, es la consecuencia que ya advirtieron varias asociaciones feministas, que veían peligro tal y como estaba redactada la mencionada norma jurídica, que tanta controversia causó.
Causa abierta
El hombre ha realizado esta alegación, recogida por El Mundo en la Comunidad Valenciana, tras tener constancia de la causa abierta contra él por quebrantar una orden de alejamiento hacia su ex pareja, aunque tiene más juicios abiertos contra la misma mujer por violencia de género.
La acusación por acoso sexual castiga específicamente la violencia que se ejerce de un hombre hacia la mujer cuando media una relación sentimental, pero la ley trans establece que el delito será juzgado en base al sexo legal que tenía la persona cuando se produjeron los hechos. De esta manera, el hombre puede sortear así la acusación.
Las denuncias acaecieron cuando el acusado aún era hombre, pero fuentes judiciales emiten que los malos tratos habían continuado contra la mujer cuando el acosador ya era legalmente una mujer. De esta manera se cumple el pronóstico de varias asociaciones feministas, que advirtieron que cualquier supuesto acosador se podrían beneficiar de la nueva norma para evitar males mayores.