La gran fuga de médicos: por qué España no puede retener a sus profesionales sanitarios

El próximo 15 de noviembre, los médicos de toda España se reunirán de nuevo en una nueva manifestación para denunciar el Estatuto Marco de Mónica García. El hartazgo de los que cuidan nuestra salud es cada vez mayor. Se les exige cada vez más, pero las condiciones no mejoran. De hecho, cada vez son peores. Todo esto, junto al colapso sanitario por la falta de médicos, provocó que en 2024 más de 3.000 facultativos se dieran de baja de la colegiación para irse fuera del país a trabajar.

Según un documento de la Organización Médica Colegial (OMC), un total de 395 profesionales se dieron de baja de la colegiación en 2024 tras solicitar el certificado de idoneidad profesional para trabajar fuera de España. Esta radiografía, aunque es triste, es el puro reflejo de lo que está ocurriendo en nuestro país, un territorio donde los mismos pacientes reclaman más especialistas.

La fuga de estos profesionales es alarmante. En 2024, la OMC realizó un total de 5.514 acreditaciones de idoneidad que pidieron un total de 3.070 profesionales colegiados para irse a trabajar a otro país europeo. Esto, además de marcar un nuevo récord en los últimos cinco años, supone un aumento en un año del 19,5 % y del 15,8 %, respectivamente.

España carece de médicos, principalmente por las condiciones laborales de precariedad, el poco reconocimiento y los salarios insuficientes y escasos y las pocas ganas de Mónica García de que permanezcan en nuestros hospitales –ya que no quiere mejorar el Estatuto Marco de sus compañeros de profesión–, hace que cada vez sea más complicado retener a los sanitarios.

Y es que muchos de ellos se marchan buscando un mejor sueldo, mejores oportunidades y consideración. A nivel salarial, en España los médicos tienen de sueldo medio 54.000 euros brutos anuales. Es decir, 2.940 euros al mes. En el mejor de los casos, esta cifra podría aumentarse hasta los 140.000 brutos anuales. Sin embargo, los jóvenes, interinos o sustitutos, aquellos que más emigran, reciben alrededor de 35.300 euros al año.

El sueldo que ganan las personas encargadas de salvar la vida a los españoles es muy inferior a la que reciben los doctores en nuestros países vecinos. En Francia o Reino Unido estos números se duplican o triplican. En el primer caso, un médico cobra de media 180.000 euros anuales, en el segundo, 214.537 euros. Además, los profesionales de la salud buscan irse fuera de Europa. Entre los destinos más llamativos están los Emiratos Árabes Unidos (268.000 euros) y Camerún (222.000 euros).

Este grave problema no solo afecta a la reducción de número de facultativos, sino también a la calidad de atención, puesto que a más horas de guardia, mayor será su cansancio y peor atención podrán ofrecer. Además, se agravará un problema vigente en España: las listas de espera para consultas y operaciones. A finales de 2024 había en nuestro país unos 846.583 pacientes pendientes de cirugía en el sistema público, con una espera media de 126 días. Cerca de cuatro millones esperaba su cita para ver por primera vez a un especialista.

Se prevé que este movimiento de doctores vaya a peor. En los últimos seis años se registraron un total de 2.080 bajas de la colegiación de profesionales que habían solicitado un certificado de idoneidad. En 2019 se dieron de baja 433 compañeros. En 2020 no se contabilizó ninguno por la pandemia del coronavirus. En 2021 hubo 395 bajas y en 2022, 358. En 2023 se registró un récord con un total de 499, cifra que se rebajó a 395 el año pasado.