Bill Gates
Expertos denuncian que la fundación de Bill Gates distorsiona las prioridades de la OMS
Entre los años 2000 y 2024, esta entidad destinó 640 subvenciones por un valor total de 5.500 millones de dólares a la organización
Un estudio publicado en la revista BMJ Global Health por investigadores de la Universidad Queen Mary de Londres advierte de que las prioridades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estarían viéndose distorsionadas por su dependencia de donaciones privadas, especialmente las procedentes de la Fundación Gates.
Entre los años 2000 y 2024, esta fundación destinó 640 subvenciones por un valor total de 5.500 millones de dólares a la OMS. De ese importe, más de la mitad se orientó a proyectos relacionados con la vacunación y la erradicación de la polio, lo que ha generado desequilibrios en la distribución de recursos, según los autores del estudio.
En concreto, unos 3.200 millones de dólares se destinaron exclusivamente a la lucha contra la polio, mientras que 2.900 millones se invirtieron en campañas de vacunación y proyectos vinculados. En total, más del 80 % de los fondos canalizados por la Fundación Gates hacia la OMS se centraron en enfermedades infecciosas.
En contraste, áreas consideradas prioritarias por la OMS, como las enfermedades no transmisibles, el fortalecimiento de los sistemas sanitarios o el acceso al agua y al saneamiento, recibieron una fracción mínima de esa financiación. Apenas 11,8 millones de dólares (el 0,2 %) se dedicaron a agua y saneamiento, y solo 37,4 millones (el 0,7 %) al refuerzo de los sistemas de salud. Menos del 1 % de los fondos se asignaron a enfermedades no transmisibles, pese a que estas son responsables del 74 % de las muertes a nivel global, concentradas en países de ingresos bajos y medios.
El estudio pone el foco en el sistema de financiación de la OMS, sustentado en un 90 % por contribuciones voluntarias, generalmente condicionadas al uso de los fondos en áreas definidas por los donantes. Las aportaciones obligatorias de los Estados miembros, basadas en criterios como población y nivel de renta, resultan insuficientes para sostener la estrategia global del organismo.
«Las contribuciones de los Estados miembros distan mucho del nivel necesario para financiar sus prioridades estratégicas, por lo que la OMS debe depender de las contribuciones voluntarias», advierten los autores. Y añaden: «Si los Estados miembros siguen ignorando estas exhortaciones, la OMS seguirá siendo vulnerable a la influencia de los donantes externos».
El posible abandono de Estados Unidos, previsto para enero de 2026, agravaría esta situación. Actualmente, la Fundación Gates representa el 9,5 % del presupuesto de la OMS.