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02 de mayo de 2024

Vista del embalse del Porma, en León

Vista del embalse del Porma, en LeónEFE

Las lluvias generalizadas no evitan que la reserva hídrica siga en descenso

Los expertos ya avisaron que las precipitaciones de estos días no iban a acabar con la sequía porque un mes de superávit «no soluciona el déficit que en varias regiones arrastran desde hace meses o años»

Las precipitaciones de los últimos días han supuesto un suspiro para la población. En especial la de aquellas zonas en las que no veían llover desde hacía más de un centenar de días y donde ya preveían que no iba a caer ni una gota hasta después del verano.
De hecho, en la Región de Murcia, Almería o Comunidad Valenciana se han registrado datos unca vistos de precipitaciones en un mes de mayo. Es el caso de Onteniente, en Valencia, que con 127,4 l/m2, ha superado el récord de máxima precipitación acumulada en un día de mayo en los últimos 100 años, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Sin embargo, estos datos de lluvias en varios territorios de España contrastan con los de la reserva hídrica que hizo públicos el Ministerio de Transición Ecológica (Miteco) este pasado martes. En ellos se observa como, por séptima semana consecutiva, la reserva hídrica de nuestro país se ve reducida con un total de agua embalsada de 26.726 hectómetros cúbicos.
Esto supone que los pantanos se sitúan al 47,7 por ciento de su capacidad y que, con respecto a la semana anterior, han descendido 307 hectómetros cúbicos, es decir, un 0,5 por ciento.
Los expertos ya habían avisado que estas lluvias no acabarían con la sequía, pero sí que ayudarían a frenar su avance. Es lo que ha reiterado este martes el portavoz de la Aemet, Rubén del Campo, que cree que los territorios del sureste peninsular y otras áreas de la vertiente mediterránea sí que verán mejora en su situación hidrológica, ya que allí la sequía no es de tan larga duración como en las cuencas del Guadalquivir o Guadiana.
Y es que, en estos momentos, las cuencas más deficitarias continúan siendo las del Guadalquivir (23,8 %), las internas de Cataluña (25,3 %), Guadalete-Barbate (25,8 %), Guadiana (32 %), Segura (33,5 %) y la cuenca Mediterránea Andaluza (34 %). Una situación que contrasta con las cuencas del norte, que se sitúan por encima del 80 por ciento, e incluso por encima del 90 en el caso de la del Cantábrico oriental (90,4 %).

Una lluvia insuficiente

Por comunidades, las del sur siguen presentando un déficit importante, especialmente Andalucía y Murcia, que se sitúan por debajo del 30 % de su capacidad hídrica. Cataluña (39,59 %), Castilla-La Mancha (37,07 %) o Aragón (45,91 %) también se encuentran por debajo de la media naconal.
El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul y portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, ha lamentado este martes que las lluvias que han caído en la comunidad en las últimas horas no hayan supuesto cambios muy «significativos» en el nivel de los embalses, salvo en el de Cuevas de Almanzora, en la provincia de Almería, porque en esa zona es donde se han registrado las mayores precipitaciones.
Desde el sector primario también celebran las precipitaciones pero matizan que no ayudan a resolver la falta de agua. La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Murcia ha explicado que las lluvias «permiten respirar a los agricultores que han perdido gran parte de sus cultivos por la escasez de agua».
A este respecto, la organización agraria ha manifestado que, debido a la sequía que afronta el territorio, «los cultivos de cereal ya se han perdido, mientras otros, como los viñedos y almendros corrían la misma suerte al no disponer de recursos suficientes para salvarlos».
Ha destacado que, salvo algunos episodios tormentosos como los sufridos en Casas Navarro o Cieza, con precipitaciones de 51 y 52 litros por metro cuadrado, y en Canteras (Cartagena), se espera que las lluvias de las próximas horas «beneficien al resto de cultivos y contribuyan a la mejora del suelo para el resto de las producciones».

La primavera más seca de la historia

Según el portavoz de la Aemet, desde el 1 de marzo hasta el 21 de mayo han caído en España 48 litros por metro cuadrado, por lo que, de momento, es la primavera más seca de la serie histórica.

En el conjunto de España, y dentro del año hidrológico, desde el 1 de octubre de 2022 hasta el 21 de mayo, se llevan acumulados 360 litros por metro cuadrado cuando lo normal son 504 litros, es decir un 28 % por debajo de lo normal.
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