
Recogida de naranja en la Comunidad Valenciana
Las naranjas de Egipto que entran en España sin pasar por caja: «Es un escándalo»
España importó 54.000 toneladas de naranjas procedentes de Egipto en 2024, 20.000 toneladas por encima del contingente que marca el acuerdo con el país africano.
El trato establece que las primeras 34.000 toneladas que entran a la Unión Europea (UE) vía España están libres de aranceles, mientras que el añadido debe de pasar por caja. El Valor Estándar de Importación establecido por el organismo europeo, útil aunque obsoleto según los agricultores, es de 0,693 euros por kilo de naranja.
Los datos de importación muestran que en 2024, las naranjas egipcias han entrado en España a un precio medio de 0,51 euros el kilo, considerablemente por debajo del valor que marca la UE.
«El precio establecido ya es barato, pero es que la media que recibimos tal y como muestran los datos de la Cámara de Comercio es muy inferior. Si el valor que se pone es 0,693 euros el kilo y la media que cobramos es 0,51 euros el kilo es más que evidente que las 20.000 toneladas que llegan por encima del acuerdo no pagan nada. Es un escándalo», señala en conversación con El Debate Carles Peris, secretario general de Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos en la Comunidad Valenciana.
El experto apunta que para un agricultor español «es imposible» llegar a los precios de salida que marca Egipto, que ha aumentado sus ventas de cítricos a España un 319 %. «Las naranjas egipcias llegan a nuestros puertos a 0,51 euros el kilo, que es lo que nos cuesta a nosotros cubrir gastos para no perder dinero. Competir así es imposible», explica Peris.
Los costes de producción de los cítricos se han encarecido notablemente desde 2020: 70 % los fertilizantes; 26 % la maquinaria propia; 25 % los servicios externos; 25 % los fitosanitarios; 20 % el agua de riego; o 19 % otras materias primas.
Rafael Navas, secretario general de Asaja Córdoba, destaca el cambio de tendencia experimentado en el mercado de naranjas: «A mitad de temporada empezó a entrar producto de Egipto masivamente y reventó los precios».
El portavoz de la región con mayor producción del fruto en España lamenta el desconocimiento de cómo se controlan este tipo de importaciones en frontera: «Nadie sabe cómo, pero lo que está claro es que las naranjas de Egipto entran por todos lados y lastran la producción español».
Navas destaca otro factor que condiciona la campaña de naranja en España, la entrada indiscriminada de concentrado de zumo: «El precio de la naranja de fresco se forma a partir del valor del zumo, por lo que hay que controlar los concentrados. Llevan un porcentaje muy bajo de naranja y sin embargo hunden los precios del fresco».
Peris denuncia que la distribución aprovecha los bajos precios de las naranjas egipcias para presionar en sentido decreciente los de la producción europea. «Al aumentar estas importaciones a precios de derribo, los mercados demandan menos cítricos europeos. Esto genera una clara distorsión del mercado y es motivo suficiente para activar la cláusula de salvaguardia», asevera el secretario general de Unión de Uniones en la Comunidad Valenciana.
Los productores de naranja apelan a la responsabilidad del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para acabar con el incumplimiento del acuerdo con Egipto.
«Hay que garantizar el cumplimiento de los precios de entrada y evitar el hundimiento del mercado europeo. Pedimos que se establezca un precio de entrada mínimo de 1 euro el kilo para los cítricos importados, ajustado a los costes reales de producción y a la inflación, así como que se aplique la cláusula de salvaguardia para las naranjas de Egipto, limitando sus importaciones durante los meses críticos de enero a marzo para proteger el mercado comunitario», concluye Peris.