El paciente que se puso el chip cerebral de Elon Musk «ya es capaz de mover el ratón con la mente»
Tres semanas después de la operación, el primer paciente del mundo en insertarse el implante cerebral desarrollado por Neuralink, la empresa de neurotecnología de Elon Musk, «se ha recuperado totalmente y ya es capaz de mover el ratón con la mente», según dijo el empresario este lunes en un encuentro virtual en X (antes Twitter), red social de la que es dueño.
«Los progresos son buenos, y el paciente parece haberse recuperado totalmente, sin efectos adversos de los que tengamos constancia. El paciente es capaz de mover un ratón por la pantalla solamente con el pensamiento», aseguró el empresario sudafricano en un evento de Espacios, la función que permite tener conversaciones de audio en directo en X.
Sin ofrecer muchos más detalles al respecto, Musk añadió que Neuralink se centra ahora en conseguir que el paciente ejecute el mayor número posible de clics con los botones del controlador.
La evolución del paciente –del que se desconoce todo, incluida su identidad y estado de salud– lleva rodeada de polémica y secretismo desde el pasado 29 de enero, cuando Musk anunció por sorpresa en un mensaje en X que la cirugía se había llevado a cabo el día anterior y que la persona que se había sometido a ella se estaba recuperando favorablemente.
Los primeros destinatarios del chip, bautizado con el nombre comercial 'Telepathy' y que «permite el uso de un móvil u ordenador, y a través de ellos, de cualquier dispositivo solo con la mente», serían personas que hubiesen perdido el uso de sus extremidades, dijo. «Imaginad si Stephen Hawking hubiese podido comunicarse más rápido que un subastador o un taquígrafo. Ese es el objetivo», condensó.
Reacciones
Las críticas no tardaron en llegar. En general, la mayor parte de científicos, médicos e investigadores en ese campo definieron el anuncio como poco más que un movimiento publicitario (pues desde hace tiempo ya existen otros implantes con atribuciones similares, si bien reconocieron la mayor sencillez estructural que caracteriza a este) y reprocharon la opacidad de los resultados obtenidos.
Musk, que públicamente no había realizado ningún otro comentario sobre la operación hasta ahora, tiene sin embargo planes mucho más ambiciosos con Neuralink, empresa que en 2023 estaba valorada en unos 5.000 millones de dólares.
Así, además de ayudar a que personas con discapacidades graves puedan hacer un uso práctico y fluido de dispositivos electrónicos, el también dueño de Tesla y SpaceX persigue el sueño transhumanista de lograr una interfaz cerebro-máquina con la que un ser humano sin ninguna patología pueda controlar aparatos electrónicos con la mente.
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