Hípica
Cuenca salta por el párkinson en la 69.ª edición del histórico certamen ecuestre
Nacido a finales de los años 50 al calor de las fiestas de San Julián, el concurso se ha consolidado como uno de los más antiguos y prestigiosos de España
La 69.ª edición del histórico certamen ecuestre dona parte de los premios, habilita 14 pases VIP para socios y pone el foco en los programas que mejoran la calidad de vida de pacientes y familias.
Cuenca ultima los preparativos para su gran cita del verano con una mirada clara: que cada salto también impulse la atención al párkinson. El Concurso Nacional de Saltos de Cuenca, organizado por el Club Deportivo Cuenca a Caballo con autorización de la Real Federación Hípica Española y respaldo de la Diputación Provincial de Cuenca, el Ayuntamiento de Cuenca y el Ayuntamiento de Tarancón —además de firmas como Coca-Cola y Mahou— celebra su 69.ª edición reforzando su compromiso social.
El foco solidario, en el párkinson
Este año, la beneficiaria de la vertiente benéfica será la Asociación Parkinson Cuenca, entidad sin ánimo de lucro que desde 2013 trabaja para mejorar la vida de las personas con párkinson y de sus familias. La organización desarrolla fisioterapia, logopedia, estimulación cognitiva y terapia ocupacional, junto a apoyo emocional, sensibilización y formación. Con alrededor de 350 socios, es ya un referente provincial por su labor continuada.
El momento álgido de la colaboración llegará el 30 de agosto por la tarde, con el Pequeño Gran Premio, patrocinado por la Diputación Provincial de Cuenca. Parte del importe del premio se destinará a financiar los proyectos y servicios de la asociación.
Además, por primera vez, el Club facilitará 14 pases especiales para que socios de Parkinson Cuenca –junto a sus acompañantes– disfruten de la prueba desde la zona VIP. La iniciativa pretende que los beneficiarios vivan la experiencia en primera persona, integrándose en el ambiente del concurso y compartiendo la emoción de cada recorrido.
Tradición, público y accesibilidad
Nacido a finales de los años 50 al calor de las fiestas de San Julián, el concurso se ha consolidado como uno de los más antiguos y prestigiosos de España. Cada jornada de competición reúne a más de 2.000 personas en el recinto de La Hípica, atraídas por la categoría tres estrellas, el nivel deportivo y un ambiente cercano y familiar.
La organización mantiene su apuesta por acercar el evento a nuevos públicos y mejorar la experiencia. Durante las ferias, la Junta de Castilla-La Mancha otorga un permiso especial para las apuestas hípicas controladas y, como novedad, este año podrán realizarse también de forma digital, lo que moderniza el proceso y agiliza las transacciones.
Igualdad y comunidad en la pista
La hípica vuelve a exhibir uno de sus rasgos diferenciales: hombres y mujeres compiten en igualdad de condiciones, y los caballos –sean machos o hembras– afrontan las mismas exigencias técnicas. A esa esencia deportiva se suma una red de apoyo institucional y empresarial que convierte el concurso en motor social y económico para la ciudad.
Con casi siete décadas de historia, el Concurso Nacional de Saltos de Cuenca demuestra que la excelencia deportiva y la responsabilidad social pueden cabalgar juntas: este verano, cada aplauso en la grada también será un impulso para quienes conviven con el párkinson en la provincia.
