Logotipo de la NASA en la entrada del Complejo de Visitantes del Centro Espacial Kennedy en Merrit Island, Cabo Cañaveral, Florida
Ciencia
La iniciativa de la NASA que ofrece tres millones de dólares por resolver uno de los grandes problemas espaciales
El proyecto 'LunaRecycle Challenge' busca nuevas tecnologías que sean capaces de reciclar la basura espacial generada en misiones lunares
Uno de los grandes objetivos de las principales agencias espaciales es el de un futuro estable en nuestro satélite, hasta el punto de poner en marcha una base lunar funcionando de manera autosuficiente. Para ello, se antoja fundamental el programa Artemis de la NASA, que buscará la vuelta del ser humano a la Luna en el año 2028.
De cara a esa futura llegada y la implantación de una posible colonia lunar, se atisba un problema en el horizonte: la basura espacial. A día de hoy la gestión de residuos en el espacio se ha convertido en un auténtico quebradero de cabeza para los expertos, quienes han puesto en marcha decenas de iniciativas para ponerle fin. Una de ellas es el programa Luna Recycle de la NASA, una competencia internacional impulsada por la agencia espacial en colaboración con la Universidad de Alabama.
Con un fondo de tres millones de dólares en premios, el reto busca ideas innovadoras para reciclar los residuos espaciales que se generen en las misiones lunares, con el gran objetivo de hacer sostenible la exploración espacial a largo plazo. En un contexto donde cada material y suministro debe ser llevado desde nuestro planeta, hallar nuevas formas de reutilizar los distintos materiales es una necesidad imperante.
Hay que tener en cuenta que una tripulación de cuatro astronautas podría generar más de 2.100 kilos de residuos de un solo uso, incluyendo envases de alimentos, películas plásticas, embalajes de espuma, ropa y más, en 365 días. Por ello, buscar una solución a este problema se antoja fundamental.
Tras una primera frase que finalizó el pasado mes de junio –y en la que se repartieron 850.000 dólares en premios–, la agencia estadounidense permitirá las distintas inscripciones de la Fase2 hasta el próximo mes de enero, mientras que los finalistas de dicha ronda se anunciarán un mes después. En esta segunda fase, el desafío se divide en dos niveles: una ronda de hitos y una ronda final.
La Tierra, vista desde la Luna
Hasta 20 finalistas de la ronda de hitos competirán en las demostraciones presenciales de prototipos y la evaluación final, programadas para agosto del año siguiente, cuando se anunciarán los ganadores. Para esta última fase, se otorgarán premios en efectivo por un total de dos millones de dólares a las soluciones exitosas en ambas rondas.
Al contrario que la primera fase, esta segunda estará abierta únicamente a individuos y equipos estadounidenses. Aun así, los participantes pueden enviar soluciones independientemente de si participaron en la Fase 1 anterior. De igual manera, la agencia detalla que todos los participantes de la Fase 2 deberán construir un prototipo físico.
«La NASA está ansiosa por ver cómo la reinvención de estos materiales puede ser útil para futuras misiones a la superficie planetaria. Confío en que el enfoque en los desechos más críticos, y la integración de las pistas de competencia de prototipos y gemelos digitales, generarán soluciones extraordinarias que podrían permitir una presencia humana sostenible fuera de la Tierra y transformar el futuro de la exploración espacial», declaró Jennifer Edmunson, directora interina del programa Desafíos del Centenario en el Centro Marshall para Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville, Alabama.
Cómo y hasta cuándo se puede participar
Tal como detalla la agencia estadounidense en su página web, la fecha límite para la presentación de propuestas acabará en enero de 2026.
Para registrarse, basta con acceder a lunarecyclechallenge.ua.edu. En el caso de que cualquier participante tenga alguna duda sobre el proyecto, podrá enviar su duda o sugerencia al correo electrónico lunarecycle@ua.edu que facilita la organización.