Anne Heche y Harrison Ford protagonizaron Seis días y siete noches en 1998
'Historias de película'
El rescate de Harrison Ford a Anne Heche en el rodaje de 'Seis días y siete noches'
La carrera de Anne Heche, la actriz fallecida este 12 de agosto a los 53 años como consecuencia de un accidente de tráfico, dibujó una extraña parábola. La curva empieza su trayectoria ascendente en 1996 con su participación en Coacción a un jurado y alcanza su punto más alto entre 1997 y 1998. En esos dos años, una hasta entonces poco conocida Anne Heche encadena un título famoso tras otro. Donnie Brasco, Volcano, Sé lo que hicisteis el último verano, La cortina de humo, el absurdo remake de Psicosis… y la cinta por la que queremos recordarla: Seis días y siete noches.
A partir de ahí, de ese año 1998, la curva que representa la filmografía de Anne Heche inicia un descenso tan vertiginoso como la avioneta pilotada por Harrison Ford en la película. La misma, por cierto, utilizada un año antes en El desafío, la cinta de supervivencia con Anthony Hopkins y Alec Baldwin enamorados de la misma mujer: Elle Macpherson. Esta vez, el accidente con esa avioneta terminaba con los dos personajes, el alcohólico piloto Quinn Harris (Harrison Ford) y la editora Robin Monroe (Anne Heche) en una isla desierta. Y claro, a la espera de ser rescatados, los dos tienen tiempo para conocerse y sortear los peligros que les acechan en esta comedia romántica de aventuras pilotada desde la silla de director por Ivan Reitman (Los Cazafantasmas). En realidad el verdadero rescate, con los mismos protagonistas, se había producido antes del rodaje.
Las grandes rivales de Anne Heche para su papel en 'Seis días y siete noches'
Harrison Ford era la primera opción para el papel de Quinn Harris. Anne Heche, en cambio, no era la primera en la lista para encarnar a la editora de una revista de moda. Ese personaje parecía destinado a Meg Ryan. O, en menor medida, a Julia Roberts, Gwyneth Paltrow, Uma Thurman, Melanie Griffith, Cameron Diaz, Elizabeth Hurley, Kristin Scott Thomas o Minnie Driver. Todas ellas figuraban en la lista de candidatas para protagonizar Seis días y siete noches.
Cuando el estudio pidió su opinión a Harrison Ford, la sorpresa fue mayúscula. Él quería a Anne Heche, quien en la audición para el papel se ganó al actor. Le contó que la primera película que había visto en su vida era La guerra de las galaxias. En lugar de escoger a alguna de esas famosas actrices, varias de ellas elevadas a la consideración de estrellas, Harrison Ford eligió a Anne Heche, una joven desconocida para el público. Desconocida, al menos, hasta que dos días después de resultar seleccionada para el papel, la presentadora Ellen DeGeneres presentó públicamente a su pareja. Sí, era Anne Heche.
Touchstone Pictures, temerosos de que esa relación perjudicase sus intereses (el público podría pensar que no había química entre los dos protagonistas del filme), optó por despedir a Anne Heche de Seis días y siete noches. Hasta que Harrison Ford llegó nuevamente al rescate de la actriz. Su influencia y su poder de convicción, los mismos que ya había demostrado, sirvieron de nuevo a Harrison Ford para salirse con la suya. Anne Heche volvía a ser su compañera de vuelo en Seis días y siete noches. Su carrera empezaría a perder altura después de esa película, a pesar de los buenos datos de taquilla en el mundo. Su relación con Ellen DeGeneres terminaría dos años después. Pero su agradecimiento a Harrison Ford no volaría nunca.
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