La película de más de tres horas que a Garci nunca se le hace larga: «La veo en la tele y me engancho siempre»

El maestro José Luis Garci podría hablar durante horas de cine, fútbol, boxeo, pintura o literatura y, lejos de cansarnos, no dejaríamos de disfrutar y aprender escuchándolo. Al cineasta y escritor le ocurre algo similar con algunas películas que duran más de tres horas y en concreto con una a la que se engancha, por muchas veces que la haya visto, cada vez que la emiten por la televisión, tal y como explicó en Campo del Gas, el espacio de boxeo dentro El Partidazo de COPE que comparte los viernes por la noche con Jaime Ugarte y Joseba Larrañaga.

José Luis Garci recordó cómo James Dean murió rodando Gigante y comparó el metraje de la película, cuyo rodaje no llegó a terminar, con la tendencia del cine actual. «Duraba tres horas. Ahora es poco. Han nominado una al Oscar, The Brutalist, que son casi cuatro horas. Hay un descanso necesario que viene con la película. No puedes decir: 'venga, la vemos toda seguida'. Quince minutos de descanso. Wicked, tres horas. Todas duran tres horas y pico ya. Yo no sé por qué», se preguntó Garci.

«Tienes un minuto para besar a una chica y tienes un minuto que te están quemando los pies. No es el mismo minuto, ¿a que no? Uno es eterno y otro es efímero», expuso el ganador del Oscar a la mejor película en habla no inglesa –la categoría que ahora se conoce como mejor película internacional– por Volver a empezar.

Fue ahí cuando reveló la película –en realidad, dos de una misma saga– a la que, a pesar de superar las tres horas de duración, se engancha cada vez que la ponen por televisión. «Es la teoría de la relatividad. Hay veces que estás en una película y no acaba nunca. Y yo veo El Padrino… Entro en casa, veo en concreto El Padrino II por la tele y me engancho siempre. Digo: 'voy a ver esta escena. Y esta otra. Y ahora cuando le dice esto. Y cuando muere este…'. Eso es el ritmo, es la vida, la relatividad», reflexionó José Luis Garci.