
El Bernabéu despliega un tifo en el partido contra el Manchester City
La trampa del Bernabéu: la grada hace volar al Real Madrid y hasta en Barcelona creen en la gesta
Ahora sí que los jugadores de Ancelotti piensan en la proeza; el triunfo en Vitoria ha generado un grado de confianza que se ven capaces de todo
Todas las veces que el Real Madrid salió perjudicado en Europa con el descanso por la cruzada de Tebas
Es un santo y seña del Real Madrid. Hay que repetir las cosas tal y como sucedieron cuando esas cosas salen bien. Todo se está gestando anímicamente de la misma manera que se gestó cuando se remontó al Wolfsburgo, al PSG, al Manchester City, al Chelsea y al Bayern de Múnich. Los veteranos del Real Madrid ya saben que son los aficionados los primeros que invocan la remontada y después es el equipo el que cree que la reconquista de Europa es posible, aunque el marcador dicte todo lo contrario.
Todo está ocurriendo como en los casos anteriores, los de este siglo y los de hace medio siglo. Sucedió ante el Derby County en los años setenta. Lo vimos frente al Anderlecht y el Borussia Mönchengladbach en la era de la Quinta del Buitre. No se sabe quién fue el primero, el huevo o la gallina, pero hoy podemos decir que los jugadores del Real Madrid de Ancelotti se creen por fin que esta gesta ante el Arsenal es posible. Hace unos días solo escuchábamos que se pensaba en hacer un gran partido, pero se veía muy difícil marcar tres goles. Esa respuesta se mantiene a escala oficial, pero no a nivel de vestuario. En la cocina de Valdebebas, Rüdiger, Bellingham, Lucas y Carvajal han cocinado con sal y pimienta la ilusión infinita por el imposible.
Ustedes se preguntarán por qué sucede este rearme mental en medio de una crisis. El principal argumento es que el madridismo ha vivido una docena de veces este tipo de remontadas cuando todo el mundo los daba por muertos. El segundo argumento es que los seguidores no les han criticado por el fiasco de Londres. Se han dedicado durante una semana a decirles que repitan la proeza. No ha habido acusaciones. Las críticas se dejan para junio. Ahora exigen la hazaña y después saldaremos cuentas. Esta razón es la clave de todas. De los éxitos anteriores. La historia se repite.
En Barcelona creen en la gesta
Precisamente, son los narradores televisivos ingleses quienes mejor han relatado estas gestas del Real Madrid. De hecho, el club madrileño ha recogido en sus vídeos históricos y de motivación las formas de contar estas heroicidades por los británicos. Lo han hecho mejor que nadie, porque sin conocer el aura y la mística del carácter español se han interesado en saber las causas de esta transformación psicológica que trasciende al fútbol. Así son los ingleses.
Ellos proceden de una cultura muy diferente y quieren entrar en el ADN del Real Madrid para saber el porqué de estas revoluciones mentales que llevan al equipo blanco en volandas y paralizan a los rivales. Porque estas son las dos cuestiones trascendentales que explican lo que sucede en el césped madridista: el público hace correr al Real Madrid más que nunca y los rivales pierden los papeles y se desconcentran ante una avalancha que surge de golpe sin saber por qué. Los narradores ingleses hablan de sueños imposibles, de brujería en el aire, de situaciones paranormales, de un teatro de los sueños, de un ambiente de confianza que no han visto en ningún otro sitio ni ámbito. Cierto.

Los futbolistas del Real Madrid celebran uno de los goles ante el Borussia Dortmund
Ahora se está repitiendo el manual de 'hagan la gesta en una semana' y los periodistas ingleses ya han venido de Madrid desde el domingo para entender qué es esto. Ven que todo mundo cree en la remontada. Esto sería imposible en Inglaterra. No hay lógica. Exacto. Es una cuestión de fe, de creencia, de ilusión, una confianza que supera lo racional y que la grada inyecta a los futbolistas en tal manera que corren más que nunca y desbordan la mente del adversario hasta aniquilarle psíquicamente.
Hay un punto fundamental que lo explica todo sin explicarlo: hasta los barcelonistas creen en la remontada del Real Madrid. La temen. Bien es cierto que otros barcelonistas la desean, pues desean medirse a los blancos en la final de la Champions.
Un golpe de autoafirmación
Dijimos hace dos días que la creencia en la remontada pasaba por vencer en Vitoria y mantener las opciones ligueras. El triunfo era necesario internamente para reivindicarse después de dos derrotas consecutivas. Esa fe intrínseca en la hazaña ha crecido exponencialmente después del triunfo con diez hombres frente al Alavés.
Asencio, insultado todo el día en Vitoria, tanto en la calle con carteles como en el estadio con gritos, se dirigió a los aficionados madridistas en Mendizorroza y les lanzó su camiseta, lo mismo que Vinicius, Rüdiger y Camavinga. Los forofos les cantaban desde la grada «sí se puede». Y los futbolistas lo han repetido desde ese instante en todas las redes sociales y en todas sus manifestaciones.
El entrenador y sus futbolistas se han puesto a trabajar con detalle en el objetivo de superar al Arsenal. El público les llevará en volandas pero hace falta que los futbolistas respondan a ese empuje casi espiritual que sentirán desde las tribunas. Han ensayado más que nunca jugadas prácticas en busca de anotar tres tantos.
Ancelotti ha aplicado en los entrenamientos el lema de «menos toquecitos y más disparar». Valverde y Camavinga ya lo hicieron en Vitoria y un tiro del francés solventó los puntos. Eso deberán reiterarlo frente al conjunto londinense. Como decía Di Stéfano, «el fútbol no es jugar bien, lo único importante es marcar goles, el fútbol son goles, lo demás son cuentos». Y es verdad. El Real Madrid adquirió esa idea, esa idiosincrasia, con él y con Paco Gento. Y no le ha ido mal desde entonces. El estilo del conjunto blanco es salir a ganar por encima de todo. Esa forma de sentir el fútbol es la que le ha llevado a celebrar las quince Champions y a conseguir todas estas proezas históricas. Ahora toca otra.
Habrá prima especial
Todos, cuerpo técnico, futbolistas y dirigentes, trabajan en hacer otra obra soberbia en la Copa de Europa: igualar una desventaja de tres goles. El Real Madrid suele pagar las primas a los profesionales por la obtención de títulos, pero en casos especiales también ofrece primas por éxitos concretos. La eliminación del Atlético supuso un premio para los jugadores. Ahora se ofrecerá otro premio específico si eliminan al Arsenal.
Es muy difícil. La razón dice que casi imposible. El corazón dice que es factible. La ilusión dice que sí se puede. Los efectos paranormales del Bernabéu deben ser investigados por Elon Musk. Pueden ser extraterrestres. El miércoles por la noche habrá 80.000 'locos' que creen en estos efectos especiales. Y once 'locos' en el césped que los ha hecho realidad bastantes veces.