Un momento de la brutal pelea entre jugadores de Real Madrid y Partizan
El Partizan llama a la calma y pide un recibimiento «amistoso» al Madrid tras la monumental tangana
Después de la monumental tangana que se produjo el pasado jueves en el partido de Euroliga entre Real Madrid y Partizan de Belgrado, el equipo serbio ha llamado a la calma a sus seguidores respecto al recibimiento al equipo blanco.
«A pesar de la desagradable situación, recibiremos al Real de forma muy amistosa», ha comentado Ostoja Mijailovic, presidente del Partizan. El Real Madrid tiene que jugar en Belgrado el tercer partido de la eliminatoria de cuartos de Euroliga el próximo martes 2 de mayo.
«Nuestra arma más fuerte, además de la brillante generación de los chicos, son nuestros hinchas, los mejores hinchas del baloncesto del mundo. Recibamos todos, hasta el último, al equipo del Real de forma señorial. Deseo a todos la bienvenida en Belgrado, el centro del baloncesto europeo», añadió el máximo mandatario del equipo serbio.
El baloncesto asistió este jueves a una de las mayores tanganas de los últimos años en el deporte. Puñetazos, empujones, llaves de judo, agresiones por detrás... hubo de todo en ese segundo encuentro de la eliminatoria de la Euroliga. Ocurrió en los minutos finales, con el encuentro ya decidido, cuando el marcador era de 80-95 favorable a los serbios.
Flojas sanciones
Los colegiados consideraron, tras cinco minutos de revisión, que 21 jugadores de ambos equipos habían cometido una infracción al entrar a la cancha estando en el banquillo, por lo que debían ser expulsados. Al no haber jugadores suficientes el partido se suspendió en ese momento.
A pesar de la gravedad de la tangana, la Euroliga fue bastante blanda con sus sanciones. El Real Madrid y el Partizan fueron sancionados con 50.000 euros por la conducta antideportiva de ambos equipos. Yabusele, jugador del Real Madrid que fue protagonista de la mayor agresión de todas, fue sancionado con sólo cinco partidos de suspensión. A Kevin Punter (Partizan) le cayeron dos encuentros y Gabriel Deck y Mathias Lessort con uno.
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