La estadística que ha roto Carlos Sainz en Williams y le puede llevar a ser leyenda en la escudería

Carlos Sainz Jr. fue este domingo el hombre más feliz de toda la Fórmula 1. Ni siquiera Max Verstappen, que arrasó en el Gran Premio de Azerbaiyán, lucía en su rostro tanta alegría como la del piloto madrileño. Su Williams funcionó muy bien durante todo el fin de semana, pero ni los pronósticos más favorables vaticinaban que Sainz iba a poder colocar su FW47 –nombre del coche– en el tercer escalón del podio.

Rompió todo tipo de lógica el madrileño y cuajó un fenomenal fin de semana firmando la segunda posición en la clasificación y aguantando el tipo en carrera para conseguir el tercer puesto. Todo esto batallando con coches superiores como los Mercedes de George Russell y Kimi Antonelli o los Ferrari de Charles Leclerc y Lewis Hamilton. Únicamente le batió Russell y además necesitó de un overcut para lograrlo porque fue incapaz de adelantarle en pista. Después Max Verstappen estuvo en otra liga y ni se acercó a él.

Fue una demostración de pilotaje lo que hizo Carlos Sainz sobre el circuito urbano de Bakú y un podio muy trabajado. Esta temporada siete equipos distintos han hecho podio –todos menos Alpine, Haas y Aston Martin– pero tanto el del filial de Red Bull como el de Sauber fueron con algo de fortuna. No así el de Sainz con el Williams, que cuajó un espectacular sábado y mantuvo el tipo el domingo.

Un logro que ha acabado con la racha de cuatro años que llevaba Williams sin conseguir un podio, algo dramático para una escudería con tanta historia como la británica, con sede en Grove. Un equipo donde siete pilotos han sido campeones del mundo y que quiere volver a la élite en los próximos años. Sainz ya ha puesto la primera piedra demostrando que en su primer año en Williams, pese a los malos resultados, está haciendo el trabajo correcto.

El premio a un duro año

Los 15 puntos de Carlos Sainz sumados en Bakú son el premio a un año durísimo donde apenas había podido sumar, castigado por muchos problemas ajenos a su rendimiento. De ahí que Alexander Albon con 70 puntos, le saque casi el doble, pues Sainz tiene 31. Aun así, este resultado ha valido al español para reivindicarse como primer piloto de una escudería que el próximo año, con el cambio de reglamento, espera estar en la parte de arriba.

De ahí que Sainz celebrase el triunfo nada más bajarse del FW47 y admitiese que era el mejor de toda su trayectoria. «Si soy sincero, no puedo describir lo contento que estoy, ha sido mejor que mi primer podio. Hemos luchado mucho durante todo el año, pero hemos demostrado hoy que el coche va bien y que cuando las cosas funcionan, podemos hacer grandes cosas», reconoció.

Es por tanto un mensaje de felicidad en Williams, equipo en el que estará la próxima temporada y donde seguirá siendo el líder. Ya se sabe que los consejos que dio Sainz a principio de temporada han servido mucho para el desarrollo del coche y también son una demostración de lo comprometido que está el madrileño en su nuevo equipo. De hecho, se hablaba de que podía estar en Williams con la intención de utilizarlo como equipo trampolín, pero nada de eso.

De hecho, es ya la tercera escudería con la que consigue subir al podio. Antes lo hizo con McLaren y Ferrari y además se da la circunstancia de que esta temporada lo ha conseguido antes que Lewis Hamilton, el fichaje estrella del equipo del Cavallino Rampante y que todavía no ha estado ni una sola vez entre los tres primeros. Tal es la decepción que ya hay muchas voces internas admitiendo que se equivocaron al no renovar a Sainz y apostar por Hamilton. Sea como sea ya está hecho y el madrileño ahora tiene puesta la mente en ser leyenda de Williams y devolverlos de forma habitual a los puestos de arriba.