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Irene Paredes declara testigo Audiencia Nacional

magen tomada a la pantalla de circuito cerrado de la sala de prensa de la Audiencia Nacional mientras la futbolista Irene Paredes declaraEFE

Putellas, Paredes y Codina respaldan la versión de Jenni Hermoso: «No paraba de llorar»

Cuarto día del juicio del beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso. Si el lunes la gran protagonista fue la delantera madrileña, el martes Luis de la Fuente y el miércoles el hermano de Jenni, Rafael Hermoso, este jueves era turno para las compañeras de la selección: Alexia Putellas, Irene Paredes y Laia Codina. Tres futbolistas muy cercanas a Jenni Hermoso y que estuvieron con ella en Ibiza celebrando el Mundial.

Cabe recordar que estar tres jugadoras no han sido las primeras en comparecer, pues este miércoles ya lo hizo Misa Rodríguez, portera de la selección española femenina. En esta jornada la primera en hacerlo fue Alexia Putellas, que lo hizo de manera telemática desde Barcelona. Ahí respondió a las preguntas del Ministerio Fiscal y recordó como se enteró del beso: « Yo voy detrás de Jenni y me dice 'Tía, me acaba de dar un beso Rubiales'. Yo le dije: 'Anda, calla'. Yo no le doy importancia en ese momento. Ya en el autobús, se empiezan a hacer comentarios sobre el beso. Irene dice que esto es grave y le digo que no era para tanto», aseguró.

Ya en el autobús, Jenni Hermoso se puso a llorar, según cuenta Putellas. «En el autobús estaba aún alucinando con lo sucedido, luego ya estaba enfadada. Estábamos intentando disfrutar de que habíamos ganado y ella ya no estaba. Luego se puso a llorar de agotamiento y no paraba, ya ni enfadada», explicó la internacional española.

Después, recordó las supuestas presiones de varios directivos para 'salvar' a Luis Rubiales. «Veo cómo le piden que vaya a hablar con Luis Rubiales y luego es cuando se pone así. Él le explica los hechos y le pide que no haga nada por sus hijas», asegura para después explicar que las jugadoras también trataron de restarle importancia: «Hablo con Jennifer en el avión. Intentábamos quitarle hierro, porque queríamos que disfrutara del momento».

El viaje a Ibiza

Finalmente, Putellas habló del viaje a Ibiza, donde considera que hubo presiones sobre Jenni Hermoso: «Jenni no estaba bien en Ibiza. Alguna vez me llegó a decir 'no sé qué hago aquí'. En Ibiza no le pregunto nada porque entiendo que siguen insistiendo en que hiciera un vídeo».

Tras la declaración de Alexia fue turno, también de manera telemática, para Irene Paredes, jugadora del Barcelona. La internacional española fue, según ha contado, la primera en decirle a Hermoso que lo de Rubiales «no estaba bien». «Ella nos dijo que le había agarrado la cara y que le había dado un beso. Lo contaba mucho, supongo que queriendo ver cómo reaccionábamos el resto», comentó.

Además, defendió la versión de Jenni Hermoso y ella es «lo único que sabe». «Jenni estaba preocupada, disgustada, nos contó esto llorando. Era un tema que le estaba agobiando porque ella quería celebrar el Mundial», aseguró una jugadora que sobre Ibiza no puede hablar porque «no estuvo».

Imagen tomada a la pantalla de circuito cerrado de la sala de prensa de la Audiencia Nacional mientras la futbolista Alexia Putellas

Imagen tomada a la pantalla de circuito cerrado de la sala de prensa de la Audiencia Nacional mientras la futbolista Alexia PutellasEFE

Por último, Laia Codina aseguró «no haber visto el beso» y que se enteró por primera vez en el momento de levantar la Copa del Mundo. Además, insistió en que fue Irene Paredes la que puso seriedad en este asunto. «Irene dice: 'Chicas, dejad de hacer bromas que esto es muy serio'. Creo que no había procesado lo sucedido. En el autobús baja con prisas porque la llaman», aseguró ante las preguntas de la fiscal.

También relató un momento vivido en el avión en el que coincidieron ella, Rubiales y Jenni Hermoso. «Él nos cuenta que sus hijas lo están pasando mal», relató a la vez que explicó lo complicado que fue ayudar a Hermoso: «Nosotras todo el rato intentábamos ayudar a Jenni. Pero ella ya estaba agobiada, llorando, había constantes reuniones. No escuché nada»

Presiones en Ibiza

Volviendo al viaje a Ibiza, donde Laia Codina sí estuvo, explicó como fueron las presiones de la RFEF para que Jenni hiciese un comunicado restando importancia a lo ocurrido con Rubiales. «Lo que vi son dos momentos en Ibiza. Cuando llegamos, en la comida, Jenni no tenía batería. Rubén Rivera le pide que lo cargue, ella no quiere, y él insiste de forma reiterada. Luego viene cinco o seis veces, que baje a hablar de Albert Luque. Jenni llega un punto en el que se agobia, y es cuando Ana Ecube dice que va a hablar con ellos», concluyó.

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