
Los jugadores del Real Madrid durante el derbi madrileño
Ancelotti crea su nuevo pasillo de seguridad: Courtois, Asencio, Valverde, Bellingham y Mbappé
Mbappé es el faro ofensivo sobre el que basculan los dos extremos, Vinicius y Rodrygo
El audio de la polémica: así fue la conversación entre Soto Grado y el VAR en el penalti a favor del Atlético
La necesidad obliga a probar cosas que serían impensables unos meses antes. La plaga de lesiones del Real Madrid solo ha tenido una buena consecuencia: el salto a la palestra de la cantera, un protagonismo de los chavales de 'La Fábrica' que ha confirmado que el club cuenta con un ramillete de jóvenes que pueden jugar en el primer equipo si se les otorga continuidad.
Raúl Asencio es la gran noticia surgida de la crisis de bajas que ha asolado a la entidad de manera impredecible. Ha ascendido al primer plantel y ha conseguido la titularidad por méritos propios. El canario dibuja el camino correcto que pretenden emular Gonzalo, Jacobo Ramón, Diego Aguado, Lorenzo Aguado, Mestre, Fran González, Joan Martínez, Fortea y otros muchachos que están en la lista de Ancelotti. Su progresión ha sido tan constante que ahora forma parte del 'pasillo de seguridad' del entrenador. Y eso son palabras mayores.
Expliquemos primero que es el pasillo de seguridad de un técnico. Es la columna vertebral de su equipo. La línea central que fija el esquema. Una línea recta, la más fuerte, la que define la personalidad del sistema de juego. La integran los 'intocables' para el 'míster'. Los hombres que le otorgan la confianza, profesionales que son líderes y fuertes en sus puestos, que aúnan calidad y determinación, clase y carácter. A su alrededor, por la derecha y por la izquierda, colocará a otros jugadores que rematarán el once, que pueden ser estrellas incluso, pero el equipo no podría sobrevivir sin esa columna de seguridad que forman cuatro o cinco futbolistas.
Muchos entrenadores, todos en sus dilatadas carreras, han pagado la novatada de trastocar el pasillo de seguridad para dar descanso a hombres que son casi imprescindibles. Todos los clubes y todos los preparadores han sufrido eso, incluido el Real Madrid. Para mover la columna vertebral debe introducirse a otros jugadores que también pueden ser líderes y eso no es fácil porque no siempre se tienen. Por ejemplo, no era fácil sustituir a Sergio Ramos, pero Pepe pudo ejercer como relevo en el pasillo de seguridad.
En la actualidad no era sencillo suplir a Rüdiger, el mariscal de campo de la columna vertebral del Real Madrid durante los dos últimos años. Por eso jugaba siempre. Hasta que su cuerpo ha dicho basta y ha solicitado veinte días de asueto.
Raúl Asencio se introduce en el pasillo
La gran noticia para Ancelotti es que un chaval que hace tres meses militaba en la Primera RFEF dio el salto al primer equipo por necesidad urgente y en tres meses se ha transformado en el jefe de la defensa. Raúl Asencio ha sabido tomar el testigo de Antonio Rüdiger en la columna vertebral del campeón de Europa, que ahora se juega la Champions en una eliminatoria que podría ser una final.
Asencio no deja de examinarse. El canario fue uno de los mejores hombres del Real Madrid en el derbi y ahora visita al City de Guardiola como nuevo integrante de la columna vertebral de Carlo. Son palabras mayores, sí.

Raúl Asencio gana un duelo a Julián Álvarez durante el derbi
El joven canario experimenta la dureza y la grandeza del máximo nivel del fútbol cada tres días, en un examen cum laude sin tiempo para digerirlo, y en su decimocuarto encuentro con el Real Madrid se enfrenta al Manchester City como líder de la retaguardia. Los dos equipos más importantes del último trienio de la Copa de Europa miden sus fuerzas demasiado pronto. Real Madrid, Manchester City y Real Madrid son los nombres que constan en la UEFA como campeones de los últimos tres años. Ahora, uno de los dos campeones quedará fuera de combate en febrero. Son las cosas del nuevo formato de la competición.
En estas circunstancias, al límite del todo o nada, jugándose ambos equipos media temporada en un duelo a muerte, Asencio se introduce en la línea de confianza de Ancelotti junto a Courtois, Valverde, Bellingham y Mbappé.
Analicen el pasillo de seguridad de italiano. Asencio se sitúa justo delante de Courtois. Valverde, sea lateral o pivote, destruye y construye. El uruguayo es el mejor medio centro para el entrenador pero la lesión de Lucas puede forzarle a jugar de lateral diestro. Y Bellingham se sitúa en campo contrario para engarzar pases de gol con Mbappé, que es el delantero centro. Eso es un pasillo de seguridad en toda regla. Si ellos fallan, el equipo pierde. Seguro.
Una columna con ramas de lujo
Estos cinco futbolistas definen la base del esquema de Ancelotti. A su vera están las ramas que vertebran el resto del sistema. Los laterales y Tchouaméni en la retaguardia. Sí Valverde es lateral, da lo mismo para el italiano, porque es un líder con su potencia y su carácter que anima a sus compañeros. En el centro del campo estarán Ceballos o Camavinga, o ambos. Y arriba dos ramales de alto nivel, Vinicius y Rodrygo, rodeando a Kylian.
Como decíamos al principio, puede haber estrellas en el once que no forman parte de la columna vertebral. Vinicius y Rodrygo son dos grandes delanteros y no integran el pasillo de seguridad. Así se hace un equipo, un sistema, una estrategia, un esquema. Los cinco puntales enmarcan el juego del conjunto en ataque y defensa. Ellos son los que mandan desde la retaguardia (Asencio) a la contención y construcción del fútbol (Valverde), pasando por la creación pura (Bellingham) para generar jugadas de gol (Mbappé).
Todos ellos se juegan media temporada frente al City.