El próximo Real Madrid: Alexander-Arnold, un central, un medio y las opciones de Miguel Gutiérrez y Nico Paz

El Real Madrid va a luchar por la Liga hasta el final con la entrega que define su carácter, pero la dirección deportiva madridista ya trabaja en la creación del Real Madrid del futuro. Con independencia del resultado del título de Liga hay una realidad indiscutible que se ha pagado muy cara: la plantilla ha echado en falta un lateral derecho y un central de garantía. El adiós de Nacho y las graves dolencias de Carvajal y Militao fueron tres bajas no sustituidas por el club.

En la misma dirección, la retirada de Toni Kroos no fue cubierta por la entidad. Se pensaba que los centrocampistas actuales podrían suplir esa importante ausencia. No ha sido así. Ceballos iba camino de ello y las inoportunas lesiones le privaron de ese liderazgo en el campo cuando estaba en la mejor forma. Modric ha tomado la batuta en bastantes ocasiones, pero su cuerpo no da para noventa minutos cada tres días. Al final ha sido el imberbe Arda Güler quien ha demostrado que puede ser ese director de juego que el club busca.

El descubrimiento del turco como jefe del timón es mérito de Ancelotti. El italiano colocó al turco para dirigir el equipo en Getafe y en La Cartuja y la decisión ha sido un éxito. Güler brilló en ambos encuentros. Mejor tarde que nunca. Ojalá lo hubiera ensayado Carlo mucho antes. Posiblemente hoy estaríamos hablando de otras cosas. Así es el fútbol.

La única verdad es que el Real Madrid no sustituyó las cuatro importantes bajas que ha tenido (Nacho, Kroos, Carvajal, Militao) y ha pagado su precio. Sin olvidar que a lo largo de la campaña sufrió otra treintena de lesiones, que a veces provocaron nueve ausencias antes de un partido. Con esta plaga de infortunios, el conjunto madrileño todavía puede ganar la Liga, pero si hubiera atacado el problema de las bajas de larga duración quizá hoy estaría luchando por la Champions y quizá hubiera sido campeón de Copa. Nunca lo sabremos.

Lo que sí sabemos es que la dirección deportiva madridista ya trabaja para realizar los refuerzos necesarios que solventen todos esos problemas.

Alexander-Arnold y un central

Trent Alexander-Arnold es el fichaje que debe solucionar la baja de larga duración de Dani Carvajal, quien obtendrá el alta en cinco semanas y piensa acudir al Mundial de Clubes, pero nadie puede saber cuando conseguirá el nivel competitivo que ha definido su carrera. El lateral derecho del Liverpool viene a cubrir ese hueco. El canterano Loren, un defensa duro y fuerte en la destrucción, será la tercera vía.

El otro objetivo de la dirección deportiva del Real Madrid es contratar un central. Huijsen era el primer elegido. Su precio, 58 millones de euros, es el obstáculo. El club blanco debe decidir si invierte ese dinero o si apuesta por la cantera: Joan Martínez, Diego Aguado y Jacobo Ramón. Hay una cuestión clara: Saliba cuesta cien millones, Castello Lukeba vale cuarenta millones y Jorrell Hato no baja de treinta. Son los tres centrales extranjeros observados por los ojeadores de Valdebebas. Está claro que cualquier fichaje valdrá mucho dinero porque es el Real Madrid el que acude al mercado y los precios suben. La cúpula de la entidad debe decidir si invierte en un central.

El canterano Joan Martínez ofrecía muy buenos datos, pero su rotura de ligamento cruzado en una rodilla le ha situado en la misma situación que Carvajal: veremos cómo regresa a la competición.

Miguel Gutiérrez como lateral zurdo

El informe interno del Real Madrid habla también de la posibilidad de reforzar el lateral izquierdo. Mendy se ha vuelto a romper y esa musculatura de cristal exige buenos sustitutos. Fran García ha demostrado que puede cubrir ese puesto. Ancelotti no le consideraba titular, pero las circunstancias exigieron su inclusión en la final de Copa y Lamine Yamal solo le superó una vez, en la primera jugada. Fran anuló después a la estrella barcelonista, que sufrió un apagón total en La Cartuja. Su velocidad, su tendencia ofensiva, su capacidad de sacrificio y su mejoría en la destrucción son virtudes que se han desvelado muy válidas para el conjunto blanco.

Hay un tercer eslabón: Miguel Gutiérrez. Fue traspasado al Girona con un derecho de recompra de ocho millones y los dirigentes del Real Madrid deben decidir si lo recuperan este verano. Su potencial atacante y su disparo le han hecho destacar en la Champions y ser tentado por la Premier. La casa blanca debe discernir si lo ficha o si admite que se vaya a otro sitio y percibir la mitad del traspaso.

La sombra de Toni Kroos ha sido alargada en el devenir de la temporada. El Real Madrid ha acusado la carencia de un director de juego del nivel sobrenatural del alemán, que ha sido una batuta insuperable a lo largo de una década. Se ha notado demasiado.

Dani Ceballos comenzó a cubrir esa misión con un notable rendimiento hasta que otra inoportuna lesión cercenó su titularidad. Modric también ha ejercido esa dirección del juego madridista, pero tiene 39 años y no puede ser protagonista durante noventa minutos cada tres días.

Al final Carlo Ancelotti ha descubierto que el joven Arda Güler puede tomar la batuta. El ídolo de Turquía brilló frente al Getafe y ante al Barcelona al mando del Real Madrid. El entrenador italiano ha descubierto que el chaval posee las virtudes para cargar con la responsabilidad de un esquema. Mejor tarde que nunca. Nunca sabremos lo que habría pasado si Güler hubiera recibido el timón mucho antes, hace unos meses, cuando Ceballos se rompió en Anoeta.

En plena formación de la plantilla del futuro, la cúpula del club madridista debe decidir si recupera a Nico Paz para potenciar el centro del campo. El canterano ofrece un excelente nivel a las órdenes de Cesc Fábregas en Italia. Tiene disparo, recursos técnicos, carácter, valentía y desparpajo. Características que enmarcan el ADN que se genera en Valdebebas. El argentino ha sido cristalino en su postura. Solo está dispuesto a volver y entrar definitivamente en la primera plantilla del Real Madrid si tiene minutos.

La probabilidad de contratar a Zubimendi por sesenta millones ha estado sobre la mesa desde hace tiempo. Tiene propuestas desde Inglaterra. La dirección deportiva madridista todavía no ha tomado una decisión. El argentino Alexis Mac Allister fue la petición de Ancelotti para reforzar la línea media. El dilema es que el futbolista del Liverpool cuesta cien millones. El alemán Florian Wirtz también tiene ese precio. El posible traspaso de Rodrygo pagaría un fichaje estelar.