Miedo escénico y nuevo lío en la portería: los problemas de Flick y del Barça hasta final de temporada

Puede que algo haya cambiado en la temporada del FC Barcelona pese a que siguen con vida en las tres competiciones. En la Ciudad Condal sueñan con el triplete, pero ante el Dortmund en Alemania se vio a un equipo que sigue teniendo muy presentes los fantasmas de años atrás. Se libraron porque el equipo negriamarillo se pegó un tiro en el pie con 2-0 al marcarse un gol en propia. Si eso no llega a pasar, quizás la historia habría sido diferente.

Sea como sea, Hansi Flick, al que le ganaron la partida táctica de manera clara, tiene dos problemas bastante serios que atajar de aquí a final de temporada. El primer de ellos es el miedo escénico que siente su equipo cuando juega en tierra hostil, el segundo, y que vamos a tratar ahora, lo tiene en la portería.

Marc-André ter Stegen está a punto de cerrar el capítulo más largo de su recuperación. El portero alemán, que se lesionó el 22 de septiembre durante el partido del Barcelona contra el Villarreal en La Cerámica, tiene la vista puesta en su regreso a la competición. Siete meses después, su retorno está al caer, pero su reaparición plantea un dilema importante para el técnico azulgrana en los últimos partidos de la temporada: ¿apostará por el regreso del alemán o mantendrá a Szczesny?

Aunque Ter Stegen ha sido el dueño de la portería azulgrana durante una década, su largo periodo fuera de los campos deja la puerta abierta a la opción del guardameta polaco, quien ha demostrado un rendimiento excelente durante los últimos meses. El alemán no es ajeno a la situación y tiene claro su objetivo: estar listo para la fase final de la Nations League que se jugará a principios de junio. «Es importante jugar con el Barça para poder estar a punto para la Nations League», afirmó Ter Stegen.

Difícil gestión de vestuario

El panorama es complejo debido a la gestión de los intereses de ambos jugadores. Ter Stegen no solo tiene en mente su vuelta al Barça, sino que busca la titularidad con la selección alemana en el duelo contra Portugal, previsto para el 4 de junio. Por su parte, Szczesny no ha creado fricciones en el vestuario. En declaraciones recientes, el portero polaco dejó claro que no tiene problemas en ceder el puesto si el técnico lo considera necesario. «Estoy aquí para reemplazar a Ter Stegen, pero respeto la decisión del entrenador. Entiendo la situación perfectamente», comentó.

El dilema de Flick es significativo: mantener a Szczesny, quien ha sido clave, o devolver el puesto al titular, Ter Stegen. De tomar la decisión de incluir al alemán en la portería, Flick estaría poniendo en riesgo una fórmula que ha dado frutos, pues el Barcelona solo ha perdido un partido de los disputados en 2025 con Szczesny bajo los tres palos.

Uno de los factores determinantes será la situación en la Champions League. Si el Barcelona sigue avanzando en la competición, introducir a Ter Stegen en ese contexto podría resultar arriesgado. En el caso de que se decidiera su regreso, tendría que desinscribir a Szczesny, lo cual podría complicar aún más las cosas si ocurriera otra lesión. En ese caso, Iñaki Peña sería el encargado de ocupar la portería.

En la Liga, la situación podría ser más flexible. Actualmente, el Barcelona lidera con cuatro puntos de ventaja sobre el Real Madrid, y si los azulgranas logran asegurar el título con jornadas de antelación, el escenario sería el ideal para que Ter Stegen regresara sin presión, permitiendo un cambio más natural y menos disruptivo para el equipo.

El triplete, en peligro

Lleva un tiempo el Barcelona soñando con hacer el triplete –sería el tercero de su historia– aunque lo visto en Dortmund ha rebajado la euforia. Se temió por otra noche europea de pesadillas y de no ser por el error de Bensebaini, que se metió gol en propia, el sufrimiento habría sido extremo. Más allá de la portería, Flick también debe solucionar los nervios de su plantilla. La Champions no perdona y otro error de ese estilo lo normal es que acabara con sus opciones. El momento donde no se puede fallar ha llegado y el Barça ya ha jugado con fuego.