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26 de abril de 2024

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Crisis de la inflación

El IPC cierra agosto en el 10,5 %, su segunda mayor tasa desde el inicio de la guerra en Ucrania

El precio del gas, disparado en agosto, empuja de nuevo a la inflación a cuotas récord. El BCE estaría preparando nuevas subidas de los tipos en octubre y diciembre

El IPC terminó agosto en el 10,5 %. El dato supera a la cifra adelantada a primeros de mes por el INE, que estimaba una tasa del 10,4 % para el octavo mes del año. El rally que el precio de la energía sufrió a partir del día 20 se oculta detrás de esta subida de la cifra de inflación definitiva. Aun así, el dato sigue por debajo del alcanzado en julio, cuando marcó su récord en 38 años al alcanzar el 10,8 %. «En principio, debería seguir esta senda de desaceleración en los próximos meses», afirma el Gobierno en un comunicado.
De esta manera, la caída de los carburantes no consigue contrarrestar el incremento del gas, germen del encarecimiento de la electricidad. Agosto fue el mes con el segundo recibo de la luz más caro de la historia. Como consecuencia, los alimentos y bebidas vieron incrementar su precio, al igual que los hoteles y restauración, fruto de la temporada alta del turismo.
Una crisis de la inflación que azota a toda la eurozona, y que ha provocado una decidida reacción por parte del Banco Central Europeo (BCE), que el pasado jueves aprobó la mayor subida de tipos de la historia de la moneda única. Su presidenta, Christine Lagarde anunció un incremento de 75pb. La medida podría replicarse en octubre y diciembre.

Los tipos podrían terminar el año en el 2,75 %, según Nomura

El brusco giro de la política monetaria cuenta con un efecto adverso. La subida del valor del euro desincentivará la demanda afectando al crecimiento de la economía.
Los expertos y analistas consideran que el papel agresivo de la institución monetaria acercará la recesión a las costas europeas. El organismo, ya ha adelantado nuevos incrementos de los tipos durante los próximos meses. El consenso prevén que puedan cerrar el año por encima del 1,75 %. El banco japonés Nomura, estima otras dos subidas de 75pb en octubre y diciembre. De cumplirse su previsión, los tipos cerrarían 2022 en el 2,75 %.

Europa se conjura para atajar el precio de la energía

En paralelo, los países comunitarios buscan atajar la escalada de la energía. Los Veintisiete encomendaron la pasada semana a la Comisión Europea el desarrollo de un mecanismo de intervención del mercado que enfríe la subida de los precios, o al menos evite un alza aun mayor en los meses de invierno. Sin embargo, se desconoce si ésta partirá de un límite a todo al precio de todo el gas, o solo al procedente de Rusia.
Se trata de medidas, las pretendida por Bruselas y Frankfurt, tomadas a ciegas. La naturaleza de la crisis de precios que afecta a medio mundo viene originada por una caída de la oferta, y no de la demanda como es habitual. Por otro lado, una reforma inédita del mercado energético comunitario podría requiere de tiempo de rodaje, algo con lo que no cuentan los países miembros.
Argumentos no faltan. El IPC subyacente español cerró agosto en el 6,4 %. El índice que descuenta energía y demás elementos volátiles sigue en máximos, lo que adelanta una inflación crónica y duradera.
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