Los diez errores más habituales en una herencia

Hacer una herencia no es algo que se haga muchas veces en la vida, es más, hay personas que no lo hacen nunca y otras que matizan varias veces su legado antes de fallecer.

Los abogados de Heritae, la legaltech española dedicada a la gestión de herencias, explican los errores más habituales que se cometen a la hora de enfrentarse a una herencia.

Falta de testamento: Uno de los errores más graves es no dejar un testamento. Sin uno, la distribución de los activos se deja a las leyes de sucesión, lo que puede no reflejar los deseos del finado. No actualizar el testamento: Es importante revisar y actualizar el testamento regularmente para reflejar cambios en sus circunstancias personales, financieras y familiares. Necesidades individuales de los herederos: No todos los hijos tienen las mismas necesidades financieras o habilidades para administrar una herencia. Dejar una distribución igualitaria a pesar de las diferencias en las circunstancias, puede ser un error. Ignorar las leyes fiscales: No tener en cuenta las implicaciones fiscales de la herencia puede llevar a una carga fiscal innecesariamente alta para los herederos. Es importante comprender las leyes fiscales y considerar estrategias para minimizar los impuestos. Dejar bienes sin especificar: Dejar propiedades o activos sin una descripción detallada en el testamento puede generar disputas entre los herederos y complicar la ejecución de la herencia.

No designar un albacea o tutor: No nombrar a una persona de confianza para supervisar el reparto de la herencia puede dar lugar a problemas de gestión y a disputas familiares.Cuidado a largo plazo: Si uno de los hijos tiene necesidades especiales o de cuidado a largo plazo, es importante planificar cómo se regularán esas necesidades financieramente.Dejar regalos condicionales: Establecer condiciones complicadas para recibir una herencia, como «solo si te casas con la persona que yo elijo», puede crear conflictos y desafíos legales y no siempre son legales este tipo de cláusulas.No comunicar sus deseos: Dejar a los hijos sin información clara sobre sus deseos y el plan de herencia puede causar confusión y conflicto después del fallecimiento.Ignorar los bienes no testamentarios: No todos los activos pasan por un testamento. Es importante comprender cómo se distribuirán los activos que están sujetos a designación de beneficiarios, como cuentas de jubilación o seguros de vida.

Desde Heritae recomiendan «mantener una comunicación abierta con los hijos para evitar problemas futuros» y avisan de que «es habitual acudir a cambiar la herencia o hacer matices porque las relaciones cambian y la voluntad del interesado prima sobre todo lo demás».