El 54 % de los afiliados a la Seguridad Social tiene un contrato basura
Los chinos no saben que nuestro modelo de crecimiento es el modelo Tezanos, que los chinos tampoco saben que es
Esta estadística da muchísimos datos, por edades y sexo, que otro día acaso valoraré, pero hoy lo que he querido es ver que ha pasado de diciembre de 2023 a enero de 2024, porque tenía la sensación de que el cierre de las rebajas de enero iba a darnos un disgusto a todos, pero en especial a la nueva ministra de Seguridad Social, la navarra Elma Saiz, que se habrá quedado completamente anonadada con la brutal caída de afiliación.
Mañana volverá a salir el Presidente del Gobierno a decirnos que estamos a punto de despegar en un cohete sideral y que la economía española ya es temida por China que está a punto de copiarnos el modelo de crecimiento.
Claro que los chinos no saben que nuestro modelo de crecimiento es el modelo Tezanos, que los chinos tampoco saben que es.
Por si me lee alguien en la embajada China, ese modelo es alterar las cifras, dársela a los medios de comunicación amigos, que estos hagan la propaganda y luego aunque los resultados sean otros no importa, porque la gente se he creído los datos alterados y si alguna vez acierta, entonces se llama al Canónigo de la Basílica del Pilar y se le pide que las campanas de la Pilarica toquen a rebato, para dar la buena nueva de que Tezanos por fin acertó.
Lo único que sucede es que cada día se suman más a la causa de que ya no se creen nada de la factoría de los «cambios de opinión» de La Moncloa y todo se empieza a poner en tela de juicio: datos económicos, mensajes, comunicados y, sobre todo, cualquier cosa que signifique auto alabanza.
Así que vamos a los datos de la afiliación a la Seguridad Social y posteriormente al tipo de contratos que se tienen en el Régimen General, para que veamos el sorprendente dato de que solo tenemos 9,4 millones de afiliados a la Seguridad Social con un contrato indefinido a jornada completa, el resto cómo dirían mis amigos allende los mares: «Bull shit».
Así podemos ver que el bofetón de afiliación a la Seguridad Social el último día de enero del 2024, es de 209.571 afiliados menos que el 29 de diciembre del 2023.
Caen en todos los regímenes de afiliación: un 1 % en el Régimen General, con 170.076 afiliados menos, un 2,8 % menos el régimen agrario, en empleados de hogar, que no suele tener una variación estacional, cae un 0,9 %, se pierden 16.309 autónomos que equivalen a una pérdida del 0,5 %, de un 1,4 % en los trabajadores del mar y un 1,2 % en los de la minería y el carbón.
En total, en un solo mes, se pierde el 1 %, que equivale a 209.571 afiliados.
Esto supone casi volver a la casilla de junio donde también llegamos a 20,5 millones. Hemos visto hace poco que el paro efectivo desde junio de 2023 no ha parado de crecer, salvo en el mes de septiembre, y que llevamos a cierre de enero una pérdida de 300.000 empleos efectivos desde esa fecha.
Pero si a continuación analizamos la distribución por tipo de contratos del Régimen General, nos llega otra sorpresa totalmente inesperada:
En esta estadística podemos ver que, dentro del Régimen General, tenemos contratos Fijos a Jornada Completa, a Jornada Parcial y Fijos Discontinuos, Temporales a Jornada Completa, a Jornada Parcial, en Formación y Otros, que normalmente suelen ser trabajadores para la Administración del Estado.
Todos los contratos del Régimen General se han reducido, excepto el de jornada completa y el de Otros, hasta perder 170.056 trabajadores afiliados.
La mayor pérdida se produce en temporales a jornada parcial y a jornada completa seguidos de los Fijos Discontinuos, en los que quedan afiliados 794.368.
Pero la cifra que llama la atención es que solo tenemos 9,4 millones de contratos indefinidos de jornada completa.
Si pensamos que tenemos 20,5 millones de afiliados totales, esto quiere decir que solo el 45,9 % de los trabajadores afiliados tiene un contrato fijo y de jornada completa y, por lo tanto, un 54,1 % un contrato basura.
En un país en que el paro efectivo ronda el 15 %, esta cifra quiere decir, que si viniese una recesión económica, es muy fácil llegar a reducir casi el 55 % de los contratos con una baja indemnización.
Esto lo que demuestra es la enorme debilidad que tienen nuestro sistema de empleo, que a lo largo de la historia, solo ha sido capaz de generar 9,4 millones de contratos que pueden considerarse NO BASURA.
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