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03 de mayo de 2024

El Rey Felipe VI (2i), junto a los ministros de Industria y Turismo, Jordi Hereu (4d), y de Transformación Digital, José Luis Escrivá (3i), entre otros, durante su visita al stand de España en el acto oficial de inauguración del MWC 2024, el principal congreso tecnológico del mundo, que prevé reunir a unas 95.000 personas, y que abre sus puertas este lunes en Barcelona. EFE/Quique García

Escrivá (centro) junto al Rey y Jordi Hereu, ayer en el MWCEFE

Más intervencionismo del Gobierno con una 'SEPI digital' que gestionará el equivalente a un año en prestaciones de paro

La SETT es el segundo organismo de calado que nace en un lapso de pocas semanas, tras el nuevo ente que estrechará el cerco sobre las energéticas

suma y sigue. El sector público empresarial tendrá un nuevo campeón en pocas semanas. Será la nueva la Sociedad Española para la Transformación Tecnológica (SETT), una «SEPI» digital que nacerá con un presupuesto de 20.000 millones de euros, el doble de lo que el Ejecutivo preveía gastar en adquirir el 10 % de Telefónica para ejercer de contrapeso al desembarco de la saudí STC.
La cuantía no es menor. Se trata, a modo comparativo, de una partida equiparable al gasto total en prestaciones por desempleo consignada en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023. Las últimas cuentas públicas destinan a ello 20.901 millones, de los cuales 13.006 corresponden al pago de prestaciones contributivas por desempleo. Cabe recordar que el presupuesto anual del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) consta en su totalidad de 28.278 millones de euros.
Escrivá adelantó este lunes que llevará la creación de la SETT al Consejo de Ministros de la semana que viene. El nacimiento del nuevo organismo, el segundo que el Ejecutivo crea en un lapso de pocas semanas –tras dar la semana pasada el primer paso para constituir una nueva Comisión Nacional de la Energía que, como ya contó El Debate, estrechará el cerco sobre el sector– se produce en un momento de gran transformación del sector en España.

Telefónica y otros movimientos

En las próximas semanas el Gobierno deberá abordar la aprobación definitiva de la fusión entre Orange y Más Móvil, después de que la semana pasada la Comisión Europea desbloqueara la operación a cambio de cesiones a Digi. Escrivá vinculó ayer la operación a que se cumpla el compromiso de que haya «un plan de inversión» industrial por parte de ambas operadoras.
Sobre la mesa está también la aprobación definitiva del desembarco de Zegona en Vodafone España, que está aún a la espera de la doble aprobación del Consejo de Ministros y del departamento de Asuntos Económicos, en este segundo caso en lo referido al uso del espacio radioeléctrico. Precisamente el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se vio ayer con el CEO del fondo, Eamon O'Hare, en el marco del MWC.
El Gobierno tiene también pendiente otro asunto, precisamente el que motivó el anuncio de volver a invertir en Telefónica 24 años después de su salida. Se trata de la operación de Saudi TElecom (STC), sobre la cual el máximo directivo de la compañía, José María Álvarez-Pallete, aseguró la semana pasada no tener aún noticias. Tampoco de la SEPI, si bien Escrivá dejó la puerta abierta a canalizar la participación estatal en la empresa a través de este nuevo ente. «Tiene sentido, pero se tendrá que ir viendo con el tiempo», aseguró el ministro en el MWC.

«Hay buenas razones para dar este paso: soberanía tecnológica, sinergías, crecimiento...», defiende Escrivá

«Hay buenas razones para dar este paso: soberanía tecnológica, sinergias, crecimiento...», justificó Escrivá. El nuevo organismo, argumentó el ministro, «va a ser fundamental para que España actúe con la máxima solidez y potencia en un mundo de cambios acelerados».
La nueva empresa pública servirá para canalizar fondos y proyectos relacionados con el desarrollo del ecosistema industrial en toda la cadena de valor de los semiconductores, apoyar con empresas públicas y al sector audiovisual. Integrará la actual sociedad SEMyS (instrumento creado para el PERTE Chip), el fondo Next Tech y el Spain Audiovisual Hub. También agrupará las participaciones de la Administración en sectores estratégicos como las telecomunicaciones, entre las que se incluirá la que tendrá en Telefónica. El nuevo ente empezará a operar, si se cumple la estimación del Gobierno, en dos o tres meses.
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