Las relaciones armamentísticas con Israel, en su mejor momento histórico pese a las promesas de Sánchez

Las diatribas del Ejecutivo contra Israel no se están trasladando a las operaciones empresariales. Pedro Sánchez anunció ayer que aprobará, en el Consejo de Ministros de este martes, un embargo total de la compraventa de armamento a Israel. Algo que, según Sánchez, ya estaba sucediendo en la práctica, afirmación que no obstante desmienten fuentes independientes.

De hecho, desde el pasado 7 de octubre y hasta abril de este año las compraventas de armamento entre España e Israel viven un momento particularmente dulce, Según un informe del Centre Delàs de Estudios por la Paz,

«Lejos de contenerse, esas relaciones son boyantes, con más adjudicaciones de contratos por mayor monto económico y con más colaboración empresarial entre los dos países. Nunca antes tantas empresas españolas o asentadas en España habían desarrollado tantos proyectos conjuntos con empresas israelíes, y nunca antes la industria israelí había sido adjudicataria de tantos contratos del Ministerio de Defensa español en cantidad (número de contratos) y volumen económico», afirman Alejandro Pozo y Eduardo Melero, en el informe Beneficio colateral. Relaciones armamentísticas entre España e Israel.

Según los datos oficiales analizados por los autores, entre el 7 de octubre de 2023 y el 28 de febrero de 2025 España ha importado armas y municiones valoradas en 15 millones de euros, y otros 21,6 millones en concepto de tanques y vehículos blindados. En total, 36,7 millones, con 2024 cerca del récord histórico alcanzado en 2023.

«Nunca España ha importado tanto como tras el 7 de octubre de 2023», aseguran los autores, que recalcan que estas cifras apenas suponen «una parte menor» del material de defensa comprado a empresas israelíes. Con todo, estas cifras apenas representa una parte menor del material de defensa «comprado» a las empresas israelíes, si bien el resto resulta mucho más difícil de rastrear.

Pero, lo que más sorprende dada la dialéctica del Ejecutivo contra Israel son las cifras de contrataciones de instituciones españolas con empresas israelíes. Así, en los dos años transcurridos desde el ataque de Hamás y la posterior invasión de Gaza, las empresas de defensa y seguridad israelíes o sus filiales se han adjudicado al menos 40 contratos, por valor de 1.041 millones de euros.

«Mientras que algunas de las adjudicaciones corresponden a servicios de mantenimiento o modernización de productos adquiridos en el pasado, otras suponen nuevos acuerdos que generarán dependencia futura en cuanto a ese mantenimiento y modernización», afirman los investigadores del Centre Dèlas.

Acuerdos con empresas españolas

Esos contratos benefician en su mayor parte también a empresas españolas, con las que estas mantienen acuerdos de colaboración. Por ejemplo, la fabricación de lanzacohetes Silam por parte de Elbit System se desarrolla junto con Escribano E&M; el misil Spike de Rafael se produce junto con Tecnobit y FMG, y en los designadores láser Litening V participan Tecnobit e Indra.

Las empresas israelíes, conocidas por su potencia tecnológica, son también importantes suministradoras de la industria nacional de defensa. El blindado 8x8 Dragón, por ejemplo, incorpora al menos siete productos de cuatro empresas israelíes: Elbit, Rafael, Plasan y Pearson.

Los investigadores señalan también que, a pesar de la fuerte polémica generada en algunos casos, como la levantada por un contrato de balas en abril del año pasado, «España no ha revocado ningún contrato armamentístico con Israel», dado que no ha aprobado ninguna medida formal administrativa que obligue, restrinja o prohíba las relaciones armamentísticas con Israel. Está por ver la letra pequeña de lo que se apruebe este martes para conocer si esto cambiará en el futuro.