Barrio de Gracia de Barcelona
Ranking
Estas son las ciudades españolas más caras para vivir en 2025
Comprar una casa o alquilar un piso es cada vez más complicado, especialmente en ciertas ciudades donde los precios parecen no dejar de incrementarse
Sin duda, el mercado inmobiliario español no atraviesa su mejor momento. El precio de la vivienda se ha incrementado alcanzando valores nunca antes vistos, especialmente en las grandes ciudades, donde son muchos los que deciden marcharse a las afueras o compartir piso para poder hacer frente al alquiler. Pero la vivienda no es lo único que ha sufrido aumentos de precio en los últimos años. La cesta de la compra, la hostelería o incluso el transporte también han ido aumentando de precio, aunque no en todos lados por igual.
Si estás buscando una ciudad a la que huir de los altos precios para encontrar un sitio que tu cartera pueda soportar, el comparador Kelisto ha elaborado un informe con las ciudades más caras y más baratas para vivir en España este 2025.
Barcelona, Palma de Mallorca y Madrid
Según el informe, el coste de vida en Barcelona supera en un 38,13% la media nacional, lo que la sitúa como la ciudad más cara de España. Tras la Ciudad Condal se encuentran Palma de Mallorca (+24,20 %) y Madrid (+20,95 %). En el extremo opuesto, Lugo se posiciona como la urbe más económica, con un nivel de precios 14,13 % inferior a la media, seguida de Zamora (-12,22 %) y Oviedo (-11,18 %).
Las diferencias en el coste de vida entre las capitales de provincia españolas son notables y afectan directamente al bolsillo de los ciudadanos. Desde los precios de la vivienda hasta los costes de transporte, impuestos o productos básicos, el impacto varía ampliamente en función de la ciudad. Uno de los aspectos más dispares es el del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), donde Soria alcanza los 176 euros anuales frente a los 23 euros que se pagan en Pamplona, lo que representa una diferencia de más del 650%.
En el ámbito de la vivienda, tanto la compra como el alquiler reflejan brechas económicas significativas. San Sebastián, Madrid y Barcelona lideran el ranking de los precios más elevados, mientras que ciudades como Zamora, Ávila o Teruel ofrecen opciones mucho más asequibles. Este contraste influye directamente en la capacidad adquisitiva de los ciudadanos y en su acceso a una vivienda digna en función del lugar en el que residan.
También resultan llamativas las diferencias en los gastos cotidianos, como llenar la cesta de la compra o pagar el seguro del coche. Aunque en estos casos las variaciones no son tan extremas como en el mercado inmobiliario, ciudades como Palma de Mallorca o Barcelona suelen aparecer entre las más caras en múltiples categorías. Por el contrario, localidades como Jaén, Guadalajara o Ceuta ofrecen precios más moderados en productos básicos o servicios.
En cuanto al ocio y el transporte, los contrastes también son relevantes. Mientras en Barcelona un billete de autobús cuesta más del doble que en Lugo, llenar el depósito de gasolina en Palma puede suponer un gasto un 44% mayor que en Santa Cruz de Tenerife. Incluso tomarse una cerveza en un bar puede duplicar su precio dependiendo de la ciudad. Estos datos revelan un mapa de desigualdad económica urbana que, aunque previsible en algunos casos, ofrece cifras que sorprenden por su magnitud.