Central nuclear
Hochtief (ACS) consolida su presencia en el sector nuclear británico con un contrato de 685 millones de euros
Este contrato forma parte de un paquete de proyectos que Sellafield ha encargado a Hochtief y a otras dos empresas por un valor total de hasta 3.332 millones de euros
El grupo ACS, a través de su filial alemana Hochtief, se ha adjudicado un contrato para apoyar las operaciones nucleares y el desmantelamiento de la instalación nuclear de Sellafield, situada en Cumbria (Inglaterra) por 685 millones de euros (595 millones de libras).
Este contrato forma parte de un paquete de proyectos que Sellafield ha encargado a Hochtief y a otras dos empresas por un valor total de hasta 3.332 millones de euros (2.900 millones de libras).
El contrato tiene una duración de hasta 15 años (9 años iniciales con opción a otros 6), según ha señalado la filial de ACS en un comunicado.
Diseño e ingeniería
Los trabajos implican el diseño, la ingeniería y la entrega de obras de infraestructura civil en apoyo de las operaciones nucleares y el desmantelamiento en colaboración con Sellafield y sus socios.
Sellafield es una gran instalación nuclear en Inglaterra, que actualmente procesa y almacena residuos nucleares y se encuentra en un proceso de desmantelamiento.
Según ha apuntado el CEO de Hochtief y de ACS, Juan Santamaría Cases, este proyecto refuerza el legado ininterrumpido de Hochtief en el sector nuclear desde la década de 1950, también como socio en ingeniería y construcción para algunos de los programas nucleares más críticos del mundo.
Este proyecto refuerza el legado ininterrumpido de Hochtief en el sector nuclear desde la década de 1950CEO de Hochtief y de ACS
Además, ha agregado que esta adjudicación refuerza el compromiso estratégico de Hochtief de apoyar a la industria nuclear del Reino Unido y su cadena de suministro.
Por su parte, el director de la cadena de suministro de Sellafield, James Riddick, ha afirmado que su labor consiste en crear un entorno limpio y seguro para las generaciones futuras y que ello implica gestionar de forma segura y rentable el legado de las operaciones históricas en sus instalaciones.
Para lograrlo, ha añadido, se necesita una infraestructura robusta y fiable que respalde las actividades de desmantelamiento nuclear y gestión de residuos.