La educación en la encrucijada Ismael Sanz

España y los Objetivos de la UE en Educación y Formación para 2030

Nuestro país tiene una proporción de jóvenes de 15 años con bajo rendimiento en lectura algo superior al promedio de la UE en PISA y levemente por debajo en Ciencias

La Comisión Europea publica todos los años, generalmente durante el mes de noviembre, el Informe del Monitor de la Educación y la Formación. Este análisis incluye una evaluación de los niveles educativos de los Estados miembros de la UE y una visión de los resultados de cada país. El Cuadro 1 recoge los principales resultados de la educación española respecto a los objetivos educativos de la UE para 2030 en el Informe publicado en noviembre de 2022.

Los datos cuantitativos más actualizados disponibles por la Comisión Europea para España muestran la situación de nuestro país en relación con los siete objetivos educativos a escala para 2030 de la UE. El 97,2 % de niños y niñas españoles de 3-6 años asisten a educación infantil de segunda etapa, por encima del promedio de la UE del 93,0 % y cumpliendo ya el objetivo comunitario para 2030 del 96,0 %. Son muchos los trabajos, comenzando por los del Premio Nobel de Economía James Heckman, que señalan que acceder a la educación infantil desde muy pequeños mejora las habilidades cognitivas y no-cognitivas futuras, particularmente en el caso de aquellos niños y niñas de nivel socioeconómico bajo que pudieran aprender menos en el caso de permanecer en sus hogares. Aún no se dispone de información ni para España ni para la UE sobre el segundo de los objetivos a escala, el relativo al alumnado de segundo año de educación secundaria con bajo rendimiento en competencia digital.

Este resultado se basará en la prueba internacional de la IEA denominada ICILS (International Computer and Information Literacy Study), que se llevará a cabo durante el año 2023. España tiene una proporción de jóvenes de 15 años con bajo rendimiento en lectura algo superior al promedio de la UE en PISA y levemente por debajo en Ciencias. La diferencia en Matemáticas (24,7 % de jóvenes con bajo rendimiento en España por el 22,9 % en la UE) si se encuentra algo más significativamente por encima en nuestro país, confirmando que esta es la competencia en que nos encontramos peor en términos relativos en el contexto internacional. Los resultados de PISA 2022 que se conocerán en diciembre de 2023 nos darán una pauta de la medida en la que España se acerca al objetivo de la UE para 2030 de tener menos del 15 % de estudiantes de 15 años de bajo rendimiento. En cualquier caso, España está más alejada de la UE y la OCDE en proporción de estudiantes excelentes que rezagados como muy bien muestra el reciente artículo del Profesor de la Universidad Carlos III, Jesús Carro.

La tasa de abandono temprano educativo de España ha venido bajando de forma importante desde los máximos del 31,7 % en 2008 hasta el 13,3 % de 2021. Aun así, la proporción de jóvenes entre 18-24 años que no ha finalizado Bachillerato, FP Media o Básica en España (y que no sigue formándose) es más elevada que el 9,0 % que ha fijado la UE como indicador para 2030. El siguiente objetivo a Escala de la UE es el de disponer de más de un 60 % de graduados en los últimos 3 años en FP Media que hayan realizado prácticas como parte del currículum en sus estudios. España tiene un registro de 95,1 %, por encima del promedio de la UE y del objetivo comunitario para 2025, incluyendo aquí la Formación en Centros de Trabajo (FCT) de cerca de tres meses.

Los datos serían menos optimistas si se refirieran a la modalidad dual en FP Media, modalidad en la que los estudiantes realizan la mitad de la formación en los centros educativos y la otra mitad en prácticas de las empresas. En FP Media Dual, el sistema educativo español solo tiene 13.730 estudiantes, un 3,8 % del total de matriculados en FP Media (Fuente: Ministerio de Educación y FP, Enseñanzas no universitarias. Formación Profesional. Curso 2020-2021). España dispone de un 48,7 % de jóvenes de entre 25-34 años con estudios superiores (estudios universitarios o de FP Superior), por encima del promedio de la UE y del objetivo comunitario del 45 % en 2030. El problema de la educación española es que también tenemos un 27,7 % de los jóvenes españoles de entre 25-34 años que, como mucho, ha finalizado la ESO. Es más del doble que el 14,2 % en la OCDE. Por el contrario, nuestro país dispone de sólo un 23,6 % de jóvenes que han finalizado la segunda etapa de educación secundaria y postsecundaria no terciaria, es decir, FP Media o Bachillerato (o FP Básica). Esta es una proporción mucho más baja que el 39,4 % de la OCDE.

Nuestro país necesita impulsar los estudios de FP Media como instrumento para reducir el abandono temprano educativo y el porcentaje de jóvenes que, como mucho, han finalizado la ESO. No se dispone aún de información para el último de los indicadores, el de la participación de los adultos en el aprendizaje a lo largo de la vida, un ámbito en donde la principal preocupación es que el 47 % de la población entre 25-64 años actualice sus competencias y que esta formación alcance también a la población que durante su juventud no tuvo la oportunidad de realizar estudios superiores.