Andonio Ortuzar y Oriol Junqueras en la celebración de la Diada 2018
Gobierno
Los socios de Sánchez se disputan el protagonismo en el apoyo a los PGE
Oriol Junqueras y Andoni Ortuzar marcan posiciones políticas frente a Junts y Bildu, en plena negociación del Gobierno para sacar adelante las cuentas públicas del próximo año
En plena negociación de los Presupuestos Generales del Estado, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, disfruta del cortejo que en los últimos días han venido protagonizando los partidos políticos vascos y catalanes en un intento por presentarse, respectivamente, como sus socios preferentes para el sostenimiento del Gobierno central durante el resto de la legislatura. En clave catalana era el propio líder de Esquerra Republicana de Cataluña, Oriol Junqueras, quien se reivindicaba como favorito al alimentar el escenario de distanciamiento con sus propios aliados de Junts en la Generalitat, ante la «paradójica» ausencia de estos en la mesa de diálogo bilateral con la Moncloa. Por su parte, el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Andoni Ortuzar, se ha postulado como la única alianza «cómoda» para Sánchez en el País Vasco frente a «aventuras» poco recomendables con EH Bildu.
El divorcio catalán
En una entrevista publicada este domingo, Junqueras ha condicionado el apoyo de los republicanos a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) a la aprobación de medidas que promuevan, protejan e impulsen el catalán, como una Ley del Audiovisual. Y lo ha hecho al mismo tiempo en el que cuestionaba la posición de quienes mientras «antes querían sentarse y ahora no lo hacen» para negociar los términos de la sostenibilidad del Ejecutivo socialista, en clara alusión a Junts.
El líder de ERC se ha mostrado muy crítico con la formación del prófugo Carles Puigdemont tras su ausencia en el último encuentro entre el Gobierno central y el Govern, celebrado el pasado mes de septiembre. Una crítica que ha aprovechado para reivindicarse en el marco del disputado liderazgo de las formaciones independentistas catalanas dentro del proyecto separatista: «La solución a un conflicto político complejo no es nunca unilateral». Junqueras ha insistido en que sólo una estrategia multilateral posibilitará que se alcance una independencia que nunca se podrá materializar sin el aval de la comunidad internacional.
A la pregunta de si ve posible la aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022, el líder de ERC ha dejado claro que será «el Gobierno español» quien decida «si quiere hacer las cosas bien o mal, y en función de esto», decidirán si le presta su apoyo, como ha venido haciendo en anteriores ocasiones. El punto de partida no puede ser más favorable a los republicanos a quienes Sánchez necesita dada la momentánea ruptura de los puentes de diálogo con Junts.
La equivocación de pactar con Bildu
Desde el País Vasco, el presidente del Comité Ejecutivo del PNV Andoni Ortuzar ha advertido a Sánchez sobre los peligros de cambiar el paso para dinamitar una alianza histórica entre ambas formaciones, para arrojarse en brazos de EHBildu. Ortuzar ha asegurado que, de hacerlo se equivocaría ya que la izquierda abertzale «es una especie de mantis religiosa que te envuelve, te camela y luego...». «Lo hizo con Aralar, Alternatiba no existe y EA ya estamos viendo. Si puede lo hará con Podemos, en eso está ahora. El PSOE que sepa lo que hay», ha apostillado.
Los socialistas «tendrán que elegir», ha avanzado Ortuzar, «pero entre el pacto con el PNV y ser segundón de Bildu». Una opción esta última que, a su juicio, «es más maquillaje y marketing político que algo hecho desde la sinceridad y los postulados éticos mínimamente exigibles en una democracia», en referencia a las últimas declaraciones de su líder, Arnaldo Otegi.
«En el PSOE han pecado de ingenuos. Por las apreturas que viven en Madrid y la agresividad del PP necesitan que sus socios no les generen problemas. Han querido ver más de lo que había porque eso les iba a poner más fácil ante la opinión pública española la relación política con Bildu. Es una mezcla de ingenuidad e interés a corto plazo. Pero el paso es cortito. A estas alturas alguien se estará arrepintiendo de no haberle puesto un 'pero'», ha asegurado Ortuzar en un claro mensaje a Sánchez.
Si el presidente del Gobierno quiere su apoyo en los próximos meses, y en los PGE, tendrá que confiar en ellos que «si en algo hemos sido coherentes es en el posicionamiento frente a ETA». Ortuzar ha insistido en que la izquierda abertzale ha intentado utilizar al PSOE para blanquearse y éste ha tendido la mano muy rápido para asegurarse un respaldo mayoritario, si no unánime, en la próxima aprobación parlamentaria de las cuentas públicas.
El PNV hará todo lo que esté en su mano para «que no haya en el futuro un lehendakari de Bildu apoyado por el PSE» ha expresado Ortuzar. «Lo que nosotros no vamos a hacer es exagerar los avances de Bildu para que ellos tengan su escaparate de aliados un poquito más presentable», ha sentenciado, tajante.
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