A pesar de que el narcosubmarino fue hundido, la Guardia Civil logró reflotarlo y recuperar la carga
Los tripulantes del «narcosubmarino» que cruzó el Atlántico se declaran culpables
El juicio por la aprehensión del primer medio de transporte de este tipo localizado en Europa durará toda la semana
Los tres acusados de conducir el primer narcosubmarino localizado en Europa han reconocido los hechos y se han declarado culpables en el juicio que se está celebrando en la Audiencia de Pontevedra. Sin embargo, los cuatro detenidos por dirigir la operación de desembarco de la droga que transportaba el medio acuático se han declarado inocentes, por lo que el juicio contra la organización desmantelada tras la aprehensión del primer medio trasatlántico de este tipo que se localiza en Europa se celebrará a lo largo de toda la semana.
Los tres acusados de viajar a bordo del narcosubmarino, Agustín Álvarez, como capitán y responsable y los primos ecuatorianos Pedro Roberto Manzaba y Luís Tomás Manzaba, se han declarado culpables de haber cruzado el océano Atlántico a bordo del semisumergible con 3.068 kilos de cocaína y hundirlo en la ría gallega de Aldán en la madrugada del 24 de noviembre del 2019.
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El periplo de este medio de transporte, novedoso en el tráfico de drogas en Europa se inició nada más y nada menos que en Colombia en octubre de 2019, donde una organización internacional transportó más de tres toneladas de droga hasta la ciudad brasileña de Macapá, en la desembocadura del Amazonas, donde fueron cargados en un narcosubmarino semi sumergible.
Un mes de odisea
De allí salieron el 28 de octubre de 2019 con intención de que el viaje por el Atlántico no durara más de 15 días. Sin embargo, tres temporales y un gran barco que estuvo a punto de llevarse por delante el aparato hizo que hasta 16 días después no llegaran a las Azores.
Allí fue detectada por primera vez la existencia de una embarcación que transportaría droga gracias a la colaboración de las policía británica. La Policía portuguesa la buscó con un helicóptero, pero al navegar a nivel del mar ya que el narcosubmarino solo sobresale 30 centímetros sobre el nivel del mar y el mal tiempo, impidieron su localización.
A unas 150 millas de la costa portuguesa del Algarve, la operación de desembarco de la droga se frustra en dos ocasiones, una por la avería de una de las lanchas encargadas de recoger los fardos y otra por la abundante presencia policial.
Galicia
Finalmente, la organización decide subir hasta las aguas frente a Galicia para tratar de llevar a cabo allí la entrega de la mercancía, que en el mercado negro podría superar los 100 millones de euros. En la Costa da Morte, un tercer intento se frustra cuando la Guardia Civil intercepta el pesquero asturiano que iba a acercar la droga hasta la costa.
Así que, después de tanto fracaso, el 24 de noviembre de ese 2019, Agustín Álvarez decide acercarse hasta las Rías Baixas y hundir ahí el semisumergible con intención de recuperar la droga más adelante.
Para entonces, la Guardia Civil ya había detectado que el medio de transporte era un narcosubmarino, lo localizó y siguió hasta su hundimiento. Una vez que llegaron a tierra, detuvieron a los tripulantes.
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