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20 de abril de 2024

El colectivismo de izquierda supone una amenaza para las libertades individuales

El colectivismo amenaza a las personas más vulnerables de la sociedadPaula Andrade

Ideas tóxicas para fabricar un país peor

Sexo, drogas e incultura: el plan de PSOE y Podemos para convertir a los jóvenes en Estado-dependientes

Varias políticas públicas orientadas hacia la gente joven e impulsadas por PSOE, ERC, Bildu, BNG y Podemos confluyen hacia la legalización de las drogas, la bajada de los estándares de exigencia educativa y la propaganda de estilos hedonistas de vida

El pleno del pasado jueves en la Asamblea de Madrid ha sido de los más tensos que se recuerdan en la actual legislatura. Y es que la propuesta de Más Madrid, la franquicia de Íñigo Errejón en la Comunidad, de legalizar la marihuana en todos sus aspectos –no solo el terapéutico– generó un intenso cruce de argumentos entre ambas bancadas del hemiciclo.
«Regular es ordenar una realidad: ni se prohíbe cuando hablamos de la bollería ni se fomenta cuando hablamos del cannabis… ¡Sean un poco coherentes!», espetó Jorge Moruno, diputado de Más Madrid, hacia las filas de enfrente. «Este es el momento con más suicidios en muchos años, el consumo de cannabis provoca esquizofrenia, bipolaridad, cuadros psicóticos, aumenta los delitos y los accidentes de tráfico», le contestó Isabel Díaz Ayuso. «Todas las drogas son un atentado contra la salud y daré esa batalla donde sea necesario», remarcó la presidenta regional.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, durante su intervención en la Asamblea madrileña el pasado jueves

La presidenta de la Comunidad de Madrid y presidenta del PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante su intervención en la Asamblea el pasado juevesEFE

Finalmente, Más Madrid y Unidas Podemos se quedaron solos votando a favor de la regulación del cannabis para adultos en el Pleno de la Asamblea. PP y Vox votaron en contra. El PSOE ha ido mudando en su posición –desde su «no» rotundo a la legalización en 2013 en el Congreso, ahora, en 2022, abogan por la creación de un «grupo de expertos» para alcanzar un «consenso internacional sobre el consumo y cultivo de esta sustancia»–; pero lo cierto es que el pasado jueves los socialistas también votaron «negativo» en el parlamento regional. La postura de Ciudadanos, que carece de representación en la cámara madrileña, era favorable a la legalización en su programa electoral de 2015.

El experimento holandés ha fallado

La experiencia de los Países Bajos, donde la venta y el consumo del cannabis es legal desde 1976, puede servir de marco referencial para España. Pese a que el cultivo de la marihuana está prohibido en Holanda, porque la intención a largo plazo continúa siendo la de rebajar la demanda, la simple aquiescencia con respecto al uso recreativo de las drogas blandas ha generado dos efectos no previstos: los Países Bajos se han convertido en uno de los principales productores de estupefacientes sintéticos del mundo y, además, el crimen organizado –el principal encargado de proveer de cannabis a las tiendas que luego venden a los pequeños consumidores– cada vez tiene mayor aceptación social debido a los inmensos beneficios económicos que genera el negocio y a la atmósfera de tolerancia reinante.
Peter R. de Vries (2017)

El periodista holandés, Peter R. de Vries, famoso por sus investigaciones contra el crimen organizado de su país, fue asesinado a tiros por unos sicarios en 2021 en una calle de ÁmsterdamEl Debate

El fenómeno guarda similitudes para los expertos policiales neerlandeses con lo que ocurre en México con el narco, aunque en los Países Bajos la corrupción de momento no ha entrado en los partidos políticos y la judicatura. En cualquier caso, Ámsterdam ya es una ciudad conocida por ser el mayor epicentro europeo de la mafia. Las luchas entre distintos clanes de narcotraficantes acontecen a plena luz del día e incluyen amenazas, sobornos y tiroteos; también asesinatos tanto de rivales en el crimen como de los periodistas que investigan el submundo de hampa.
Curiosamente, la referencia explícita al narco estuvo presente la pasada semana en la Asamblea de Madrid. «Las drogas producen delincuencia organizada y eso lo sabe bien su partido, Podemos, del que venía usted, y del que se separó por poder y no por principios. Ese partido nació de las narcodictaduras. Bien sabe usted del sistema criminal que tienen detrás las drogas», le contestó Isabel Díaz Ayuso a Mónica García, la líder de Más Madrid y principal impulsora de la propuesta de legalización del cannabis. «No le pienso decir a los jóvenes que se fumen dos porros, que alguien les va a regalar una paga y el aprobado, porque esa miseria me niego a que esté en la Comunidad de Madrid», zanjó Ayuso.

Drogas + Joven = Dificultades

Pero ¿qué hay de cierto en las afirmaciones de la presidenta regional? En los Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid, que atienden diversas problemáticas juveniles, disponen de un conocimiento social de primera mano. Existe, sin embargo, miedo a hablar. El temor por quedar señalado, por entrar en cualquier lista negra –presente o futura– hace que muchos profesionales, a la hora de conversar con los medios, soliciten hacerlo preservando su anonimato.
Macrobotellón en la Ciudad Universitaria de Madrid

Macrobotellón en la Ciudad Universitaria de MadridEuropa Press

«Las drogas suponen un atentado contra la salud. Muchos de los problemas serios que surgen con los jóvenes –aislamiento, salud mental, delincuencia, violencia– están relacionados con las drogas. Es así. Lo tenemos más que demostrado… Legalizarlas significa ponérselas un poco más cerca», señala un trabajador social con décadas de experiencia en primera línea. «El enfoque científico de la cuestión apunta justo en la dirección contraria; la ciencia demuestra el efecto dañino, incluida la adicción, que producen estas sustancias, especialmente entre los jóvenes, porque son más vulnerables. Hay que explicarles a los chicos en base a los estudios científicos, es decir, en base a las evidencias, que las drogas les hacen daño. Mucho daño. Y luego, a mayores, para educarles también están los testimonios de la gente que ha estado enganchada, en bandas, de los que han tenido problemas de salud mentales o sociales, etc. Los testimonios sirven de mucho», comenta el interlocutor.
Con relación al prisma de izquierdas sobre la cuestión educativa –la última reforma aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez permite que los alumnos puedan graduarse sin tener todas las asignaturas aprobadas y presentarse a la Selectividad con un suspenso–, la valoración que realiza otra fuente de El Debate próxima a la CAM también dista de resultar positiva: «Bajar el nivel de exigencia tiene un claro impacto negativo entre los chavales. El PSOE y Podemos lo encubren diciendo que la Unión Europea indica que las competencias han de resultar más prácticas, pero Europa en ningún caso exige una rebaja en cuanto a los conocimientos en sí. Sin exigencia, sin esfuerzo, la calidad baja, y también baja el margen de autonomía de los jóvenes, que tienen menos capacidades para luego afrontar las dificultades».

Guía gubernamental para drogarse bien

Los expertos de la región de Madrid manifiestan igualmente su valoración sobre folletos publicitarios que explican a los jóvenes como participar «de forma segura» en orgías de chemsex que implican el consumo de drogas por vía intravenosa; dichos folletos están siendo subvencionados con dinero público tanto por el Ministerio de Sanidad, dirigido por Carolina Darias, como por el Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ), adscrito a la consejería de Mónica Otra, la vicepresidenta de la Comunidad Valenciana.
«Podrán decir que estos folletos buscan educar y prevenir… ¡Qué van a decir! En la práctica, lo que hacen los folletos es dar publicidad a estas conductas. Hacen más accesible el 'reto' para que así les pique la curiosidad y entren en esas dinámicas», apunta otro interlocutor de El Debate para, acto seguido, realizar una valoración final: «Si frente a una cultura que patrocina el esfuerzo, el mérito, las metas a largo plazo, que son las que de verdad importan en la vida, ofrecemos a los jóvenes una cultura del placer, de la inmediatez, al final ¿qué nos sale? Pues te lo voy a decir… Nos salen ciudadanos más débiles, menos comprometidos, con menos recursos propios y, por tanto, con más dificultades de todo tipo –sanitarias, mentales, educativas, laborales– para hacer frente a los mil problemas que surgen en la vida».
¿Hay una intención ideológica detrás o estas propuestas son simple desparrame? «Nada de esto es tan casual, ni tan libertario ni tan guay como parece… En el páramo antropológico que surge tras la aplicación a gran escala de estas leyes, te salen personas con una absoluta falta de control y, por tanto, muy vulnerables... Son chicas y chicos más solitarios de lo que pudiera parecer en la euforia de la fiesta o el postureo en la redes sociales; individuos carentes de proyectos que vayan más allá del presente, del principio de placer o de la mera ambición personal... Y así, sin vínculos sociales sanos y fuertes, encerrados dentro del individualismo, la democracia se debilita, porque al final solo permanece una cosa: el poder, el Estado».
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