Juicio con jurado popular promovido en una foto de archivo
Tribunales
Eximen de culpa al anciano que mató a su mujer con 14 martillazos por tener sus capacidades «anuladas»
La presidencia de la sala deberá dictar una sentencia acorde con el veredicto de no culpabilidad del jurado, por lo que no será castigado penalmente
Un jurado popular ha declarado no culpable a un hombre de 86 años acusado de matar a su esposa, de 81, propinándole más de catorce golpes con un martillo en la cabeza tras una discusión en su domicilio de Madrid en 2021 al considerar que tenía sus capacidades anuladas.
En su veredicto, según fuentes jurídicas, el jurado ha dictaminado que el acusado, Eduardo G., en el momento de cometer el crimen padecía un «delirio celotípico» –un trastorno que se caracteriza por creer que uno está siendo engañado por la pareja–, motivo por el cual ha creído que tenía sus capacidades anuladas.
La Audiencia Provincial de Madrid finalizó esta semana el juicio en el que la Fiscalía ha mantenido la pena de quince años de prisión para el acusado, si bien al inicio del mismo manifestó que contemplaría eximirle completamente si durante el proceso quedaba probada la cuestión de sus capacidades cognitivas.
Sin embargo, al contrario de lo declarado por el jurado, la fiscal ha argumentado que el acusado tenía sus capacidades «alteradas» y no «anuladas» y ha optado por una eximente incompleta.
Tras pronunciarse el jurado popular, la presidencia de la sala deberá dictar una sentencia acorde con el veredicto de no culpabilidad, por lo que no será castigado penalmente.
La letrada de la defensa, por su parte, ha pedido la libre absolución de su representado en todo momento.
En declaraciones a EFE, esta abogada ha explicado que el informe que se le hizo al acusado en 2021 ya «dejaba claro» que no tenía las capacidades cognitivas y volitivas cuando cometió el asesinato, con lo que ha concordado el jurado.
Según el escrito de acusación del Ministerio Público, el crimen ocurrió hacia las ocho de la tarde del 15 de junio de 2021, cuando el acusado, tras una discusión con su mujer en la cocina del domicilio familiar, cogió un martillo y, «sin que esta pudiera esperar un ataque por su parte, de manera imprevista y repentina le propinó un golpe en la cabeza».
Añade que la esposa huyó al cuarto de estar, cayó al suelo y su marido siguió propinándole golpes en la cabeza más de catorce veces «con extrema agresividad».
Los agentes de la Policía llegaron a la casa momentos después y detuvieron al acusado que, según la fiscal, quiso «imponer su voluntad» y manifestar su control sobre la vida de su mujer al creer que ella tenía una relación extramatrimonial y que lo iba a abandonar. La víctima fue traslada al hospital 12 de Octubre de Madrid, donde falleció en la madrugada del día siguiente.
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