El presidente vadco, Iñigo Urkullu
PNV
Urkullu alerta del «riesgo» de repetir elecciones si Sánchez no mantiene sus apoyos tras ser investido
El presidente del País Vasco ha asegurado que «me preocupa tanto la no investidura como la elección de un presidente sin estabilidad y con riesgo de volver a convocar unas generales»
el presidente vasco y dirigente del PNV, Iñigo Urkullu, ha advertido del «riesgo» de repetición de las elecciones generales si el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, logra los apoyos suficientes para ser investido pero no los mantiene durante la legislatura y no consigue la estabilidad suficiente para gobernar durante cuatro años.
Urkullu ha hecho esta reflexión en una comparecencia de prensa de balance de su viaje a Japón, encabezando una delegación de empresas vascas, en la que también ha alejado la posibilidad de un adelanto de las elecciones vascas.
El presidente vasco se ha referido a la situación política en España y se ha mostrado preocupado «tanto por la no elección» de un presidente de Gobierno como por que esta se produzca al conseguir el PSOE cerrar acuerdos puntuales con los partidos solo para la investidura sin más recorrido para el resto de la legislatura.
«Me preocupa tanto la no investidura como la elección de un presidente sin estabilidad y con riesgo de volver a convocar unas generales, aun cuando se haya conformado Gobierno», ha opinado Urkullu, quien ha insistido en que «si Pedro Sánchez es investido» necesitará «de todos los votos (de los partidos que le apoyen) todo el tiempo».
En este sentido, ha recordado que puede tener consecuencias «serias» tanto que Sánchez no sea elegido, como que lo sea con el resultado de «un Gobierno inestable con una mayoría absoluta del PP en el Senado y una situación de conflictividad internacional», en referencia a la situación en Ucrania y en Oriente Próximo.
Urkullu ha colocado la responsabilidad de lograr la estabilidad institucional tanto en el candidato a la reelección como en los partidos que lo apoyan.
En cuanto a la decisión de Bildu de respaldar la investidura de Sánchez, ha apuntado que no se trata de la apertura de «una nueva fase política» porque la relación entre esta coalición y el PSOE «empezó ya en la década de los 2000 con Rodríguez Zapatero». «Denominar este tiempo nueva fase política me parece excesivo», ha zanjado.
Urkullu también se ha referido a la situación política en Euskadi, que afronta el final de una legislatura que, por plazos, podría terminar en el mes de julio con la convocatoria de elecciones autonómicas.
El dirigente del PNV ha dejado claro que no está nervioso, sino tranquilo y centrado en el liderazgo del Gobierno vasco. Ante las voces que hablan de un posible adelanto electoral, Urkullu ha restado «fundamento» a esas interpretaciones, ha indicado que no se siente «presionado» por ellas y ha dejado claro que convocará las elecciones «cuando crea que es el momento».
No obstante, ha alejado la posibilidad de este adelanto, tal y como ha hecho ya públicamente en anteriores ocasiones en las que ha sugerido que pueden coincidir con las europeas en junio. «Tenemos mucho trabajo por hacer», ha asegurado.
«Tenemos muchos proyectos de ley en tramitación parlamentaria y somos muy conscientes de lo que queda hasta el final de legislatura, que podría ser hasta el 12 de julio de 2024. Tenemos un programa de gobierno por cumplir», ha indicado.
En cuanto a su candidatura a repetir en el cargo, Urkullu ha recordado que le corresponde decidirlo a su partido, al tiempo que ha reiterado que ahora está centrado «en lo que tiene que estar».
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