Momento de la agresión al taxista por parte del cliente
Nuevo vídeo de una brutal agresión a un taxista: el cliente se impacientó
Un taxista recibe varios puñetazos y guantazos de un cliente joven que se impacientó
Una madrugada cualquiera del mes de octubre, Francisco, taxista de profesión, iba circulando con su coche por la avenida Camino de las Torres de Zaragoza. Un camión de la basura gira a la izquierda y bloquea ambos carriles. Eso le impide arrimarse a la acera cuando un cliente levanta la mano y le llama. Se queda en mitad de la calzada. El cliente, mientras habla por el móvil y en la otra mano lleva comida, se impacienta, se acerca al vehículo y abre la puerta trasera para montarse.
El camión se va y Francisco, mientras mueve el vehículo le reprende: «Señor, espérese un momento que es peligroso. Se retira el camión de la basura, me orillo a la acera y se sube». El joven va caminando con la puerta abierta hasta que se harta. Su respuesta es estrellarla con violencia para cerrarla. El taxista no se contiene y se baja para reprenderle: «¡Payaso!, ¿qué haces?». Yeison, que así se llama el cliente, colombiano de 23 años que está irregularmente en España, se enfada y según le ve acercarse le lanza una patada.
Francisco trata de defenderse y hay un forcejeo. Se cae el móvil y la comida al suelo. Yaison, mucho más joven y fuerte lanza al taxista contra un coche aparcado. Rebota y cae al suelo sentado. El joven colombiano le da un puñetazo en la cara. Es entonces cuando otro taxista que lo está grabando todo desde su coche se baja a echarle una mano a su compañero. Yaison grita: «¡¡¡No me tratas así!!!». Francisco responde: «Pero, ¿por qué me das ese portazo?». Al joven la pregunta le molesta porque vuelve a soltar el puño contra la cara de Francisco.
Una amiga del tal Yaison se acerca a pararle y se pone entre ellos. El taxista logra levantarse y le pide a su compañero: «Llama a la Policía, por favor». El joven colombiano no desiste y le mete otro guantazo al taxista. Le insulta, le vuelve a cruzar la cara una vez más hasta que huye. Se escapa porque la amiga ha oído como el otro taxista está llamado a la Policía.
Los agentes llegan al lugar y persiguen al delincuente. Finalmente logran pararle. Yaison se niega a ser detenido y brazea, pero los agentes lo reducen y le ponen las esposas. Horas después queda en libertad provisional a la espera de juicio por un delito leve que como mucho será una multa.
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