Pedro Sánchez y su mujer, Begoña Gómez
Lo previsible
La Oficina de Conflictos de Intereses del Gobierno exculpa a Sánchez en el caso Air Europa
El organismo, dependiente del Ministerio de Escrivá, archiva una denuncia del PP contra el presidente por no abstenerse de los consejos de ministros donde se decidió el rescate a la aerolínea
La Oficina de Conflictos de Intereses ha taponado la vía que intentaba abrir el PP contra Pedro Sánchez por las actividades profesionales de su mujer, Begoña Gómez.
El organismo, que depende del Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, el de José Luis Escrivá, ha concluido que el presidente no tenía por qué inhibirse cuando el Consejo de Ministros decidió el rescate a Air Europa con 615 millones de euros, en respuesta a una denuncia que el partido de Alberto Núñez Feijóo presentó el pasado jueves.
«La mujer del presidente del Gobierno no tiene ni ha tenido relación laboral o profesional alguna que implique el ejercicio de funciones de dirección, asesoramiento o administración» en la aerolínea, según la Oficina de Conflictos de Intereses.
La resolución se conoce el mismo día en el que El Confidencial revela que Air Europa ha reconocido reuniones con la mujer de Sánchez cuando ésta estaba al frente del Instituto de Empresa African Center. En concreto, los encuentros fueron con el consejero delegado de Globalia, matriz de Air Europa, Javier Hidalgo.
El Debate informó el viernes de que Wakalua, una subsidiaria de Globalia, pactó en 2020 un pago de 40.000 euros al Africa Center. El grupo turístico aseguró que el acuerdo quedó en suspenso por la pandemia y solo se desembolsaron 1.716,53 euros para un viaje a Londres.
La portavoz del PSOE, Esther Peña, se ha felicitado de la decisión. «Lo dijimos en su momento, dijimos que esta cuestión no tenía base jurídica alguna, y que el PP solo buscaba con esto introducir más ruido y más ruido para tapar el escándalo que se cierne sobre Isabel Díaz Ayuso y ahora también sobre su jefe de Gabinete», señaló. Y añadió: «Les hago una apuesta. Seguramente que el PP dirá ahora que la Oficina de Conflictos de Intereses está al servicio del Gobierno, etcétera. Siempre es lo mismo (…). No tiene sentido esta política de intentar inhabilitar a personas que no tienen nada que ver con tramas y con casos oscuros, como sí que parece que lo tiene el entorno de la señora Ayuso».
En su denuncia, los populares señalaban que la ley reguladora del ejercicio del alto cargo de la Administración General del Estado dictamina que «se entiende que un alto cargo está incurso en conflictos de intereses cuando la decisión que vaya a adoptar» beneficie a «los intereses familiares, incluyendo los de su cónyuge».
Asimismo, pedían que Sánchez fuera inhabilitado para ejercer un cargo público durante un período de entre 5 y 10 años, como estipula el régimen sancionador de la norma.
Los populares no tenían demasiadas esperanzas en que dicha oficina fuese a darles la razón, como así ha sido. El vicesecretario de Política Autonómica y Local, Elías Bendodo, ha recordado que es «un órgano del Gobierno nombrado por el Gobierno».
«Eso no quita para que haya conflicto de intereses real del presidente del Gobierno por haber participado en la votación del Consejo de Ministros para beneficiar a empresas vinculadas a su esposa», según Bendodo. Además, ha anunciado una batería de preguntas parlamentarias para determinar si la mujer de Sánchez actuaba de «mediadora o conseguidora» de la trama corrupta del PSOE.
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