El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, junto a Isabel Díaz Ayuso

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, junto a Isabel Díaz Ayuso

La promesa de Feijóo para vetar a los herederos de ETA en Moncloa: «No entrarán conmigo»

El líder del PP, Marimar Blanco y Ayuso coinciden en un acto de homenaje en denunciar pactos políticos con los «herederos» de ETA

En el 28 aniversario del asesinato de Miguel Ángel Blanco, el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha criticado duramente la presencia en el Gobierno de los que considera «herederos políticos de asesinos». Durante el acto de homenaje celebrado en Madrid, aseguró que si llega a la presidencia del Gobierno, «eso no ocurrirá» y prometió no sentarse jamás con quienes justifican la violencia. Feijóo apeló al «mínimo gesto de dignidad» y defendió que «España entera no llenó las calles de dignidad y memoria» para permitir que los herederos de ETA entren «en la Moncloa como si nada».

El líder del PP también anunció una serie de medidas que tomaría en caso de gobernar, como prohibir homenajes a etarras y garantizar que la lucha contra ETA forme parte del currículo escolar. Reivindicó que la memoria de Miguel Ángel Blanco no pertenece solo a su partido, sino a todos los españoles. «Hacerlo sería dar la razón a quienes persiguieron con violencia a Miguel Ángel», declaró, insistiendo en la importancia de mantener vivas sus ideas y valores.

Marimar Blanco, hermana del concejal asesinado, respaldó las palabras de Feijóo y afirmó que «esto no va de partidos, va de principios». Denunció los pactos del Gobierno con Bildu, calificándolos de «traición moral, histórica y política», y advirtió que «la memoria se ve amenazada» por el «olvido selectivo» y el «blanqueamiento» de quienes nunca han condenado el terrorismo. A su juicio, lo que se está viviendo es una «vergüenza histórica» que perseguirá al PSOE.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, reclamó el regreso del «espíritu de Ermua» y criticó con dureza que «los cómplices de ETA» tengan influencia política. Calificó de «inconcebible» que los fines del terrorismo estén avanzando y denunció que sus herederos reciben homenajes y «firman pactos cada vez menos secretos con el Gobierno». Ayuso hizo un llamamiento a no olvidar a las víctimas y a enseñar a los jóvenes lo que ocurrió: «Todos somos responsables de que se haga justicia y se cuente la verdad».

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