El Supremo avanza en la «información sensible» de Ábalos, que se plantea renunciar al acta para ralentizar la causa

El que fuera ex ministro de Transportes de Pedro Sánchez, José Luis Ábalos, recibió, presuntamente, un trato de favor en el seno del PSOE permitiéndole colar facturas y tickets que no correspondían con gastos de representación, y que nadie se atrevió a fiscalizar al tratarse del secretario de Organización, es decir, el responsable directo de la Gerencia que se convirtió en una «fuente irregular de ingresos en metálico (...) sin respaldo documental» para el socialista.

Unas presuntas retribuciones irregulares que no sólo fueron dinerarias, en efectivo, sino también en especie, a través de la presunta contratación de servicios de compañía femenina de los que habría disfrutado Ábalos, pagaos por Koldo, sin necesidad de desembolsar un euro de su bolsillo. Es, precisamente, esta pata de la investigación penal que se sigue en el Supremo contra él, por varios delitos de corrupción, la que más preocupa al ex socialista que, tras el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y según ha podido saber El Debate, estaría barajando la posibilidad de renunciar a su acta para perder la condición de aforado que todavía conserva y, con ello, obligar al Supremo a trasladar el la parte del caso PSOE que instruye para los aforados, en su totalidad, a la Audiencia Nacional.

Así las cosas, las nuevos indicios que sitúan al que fuera número 3 de los socialistas como uno de los destinatarios de los sobres procedentes de la 'caja B' de Ferraz con los que, supuestamente, la formación habría pagado sobresueldos, procedentes de las 'mordidas' que varias empresas de la trama entregaron a cambio de adjudicaciones de obra pública, previamente amañada.

Sin embargo, adicionalmente, Ábalos habría recibido retribuciones en especie, abonadas por su entonces asesor Koldo, quien con la ayuda de su ex mujer Patricia Úriz, se habría encargado de comprar billetes de tren y sufragado alojamientos para «terceras personas» con las que el ministro mantuvo «encuentros». íntimos. Se trataría, en definitiva de servicios de compañía femenina que habrían llegado a ascender a un importe total de 4.975 euros, identificados por los agentes.

Evidencias que fueron obtenidas por los agentes judiciales del análisis de los terminales móviles incautados al propio Koldo en los registros practicados en su domicilio, y en las viviendas de los demás imputados, en marzo de 2024. Conversaciones, mensajes de Whatsapp y registros de llamadas que, ahora, el magistrado Leopoldo Puente, ha autorizado a que puedan ser consultadas en sede judicial.

No en vano, en su última resolución, en la que denegó a Koldo la petición por la que trataba de recuperar sus teléfonos, en poder de la Guardia Civil, el juez ordenaba unir «a las actuaciones el informe policial fechado el día 8 de octubre» y «los documentos digitales que lo acompañan». «Sin embargo, el adenda o apéndice digital relativo a extremos que pudieran afectar a la privacidad» del ex ministro Ábalos, «será unido a la pieza de información sensible», cuya apertura se acordó por auto del pasado 6 de febrero.

Esta decisión permitirá a todas las partes personadas en el procedimiento, incluidas las acusaciones populares, bajo la dirección letrada del Partido Popular, acceder a la consulta íntegra del contenido de todo el material referido a la intimidad de Ábalos del que están aflorando nuevas pruebas sobre la operativa de la trama. Sin embargo, dicho cotejo sólo podrá efectuarse presencialmente en la Secretaría del TS, sin que puedan extraerse copias de nada hasta, como mínimo, la «apertura de la fase oral».