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El exvicerrector de Relaciones Institucionales de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Juan Carlos DoadrioEuropa Press

La corrupción que salpica al Gobierno

El ex vicerrector de la Complutense admite que se sintió «obligado» a impulsar la cátedra de Begoña Gómez

Juan Carlos Doadrio ha reconocido en el Senado que la Universidad madrileña está «movilizada» contra Isabel Díaz Ayuso

El ex vicerrector de Relaciones Institucionales de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Juan Carlos Doadrio, se ha sentado en el Senado, en el marco de la Comisión que investiga la cátedra de Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para reconocer que se sintió «obligado» a impulsarla. "Yo me siento obligado por ser vicerrector de las instituciones. Las cátedras las tengo que hacer yo. Si está bien la documentación, me da igual que se llame Begoña Gómez o que se llame Pedro Sánchez», ha dicho durante su comparecencia.

Doadrio ha asegurado que el reglamento permite que el rector pueda «excepcionalmente» nombrar a un director de una cátedra que no sea de la Universidad Complutense de Madrid «siempre y cuando haya un director» y que fueron los servicios jurídicos del ente académico los que avalaron, además, la posibilidad de que en el caso de la esposa de Sánchez se diese a pesar de la circunstancia de que no era licenciada.

«La respuesta de la asesoría jurídica fue que, como no se ha contemplado en la excepción del rector que el director sea licenciado o graduado, para ellos estaba bien aplicada la excepción», ha insistido, señalando que fue Goyache el que «promocionó la cátedra» y que él se limitó a firmar para ponerla en marcha.

Además, el que fuera vicerrector de la Complutense ha desmontado la versión prestada por el PSOE en relación con Gómez. Mientras el partido ha venido manteniendo que la mujer de Sánchez daba clases en la mismas, desde 2012, Doadrio ha matizado sobre esa etapa, que se prolongó hasta 2014 que se trataba de «un mero cursillo» que «no llegaba a la categoría de máster». Si bien se entregaba «un diploma» al término del mismo.

Con posterioridad, entre 2014 y 2020 fue cuando Gómez arrancó su colaboración como docente en un máster vinculado a la Escuela de Gobierno de la UCM que, habitualmente, están reservados a los profesores permanentes. Si bien, la mujer de Sánchez le pidió el favor al rector que, a su vez, accedió. Un trabajo por el que la esposa del presidente cobró un total de 15.000 euros.

Para finalizar, Doadrio ha reconocido que tuvo que «empollar» lo que significaba la «transformación social competitiva» porque «sabía que era la mujer del presidente y no quería problemas». «Ella dice que son valores vinculados a la responsabilidad sociales» de las empresas que «tendrán en cuenta en el futuro los accionistas», ha aclarado.

La implicación de la asesora de Moncloa

Sobre el papel de la asesora de Moncloa, Cristina Álvarez, que prestó servicios profesionales a Gómez, presuntamente, fuera de sus responsabilidades como cargo pagado del erario, Doadrio ha relatado cómo «me llamó» para «perdirme un modelo de convenio y en cinco días estaba todo hecho». «Me extrañó mucho», ha añadido el ex vicerrector, porque en este tipo de asuntos «se tarda» más tiempo.