Fotomontaje de Sánchez con Ábalos, Leire, García Ortiz, David Sánchez, Salazar, Begoña Gómez, Santos Cerdán, María Jesús Montero y Koldo García
El intento de Sánchez de cerrar una semana marcada por la corrupción y los abusos sexuales
El jefe del Ejecutivo intenta pasar página tras días marcados por imputaciones, denuncias internas y una ofensiva política de la oposición por los casos de corrupción y acoso sexual en el PSOE
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha tratado de cerrar una de las semanas más complicadas de su mandato admitiendo que en el PSOE se pueden haber «cometido errores» ante los casos de acoso sexual, pero defendiendo que «merece la pena gobernar, aunque sea en estas circunstancias» porque, a su juicio, «a los españoles les renta este Gobierno». Así lo afirmó en un mitin celebrado en Cáceres con motivo de las elecciones autonómicas en Extremadura.
Durante su intervención, Sánchez sostuvo que el Partido Socialista actúa con «contundencia» tanto frente al acoso como ante la corrupción, reivindicando que fueron «los primeros en poner en pie este protocolo» y asegurando que estos comportamientos son una «traición» a los principios del partido. Frente a las críticas, contrapuso su actuación a la del Partido Popular, al que acusó de «connivencia» con casos de corrupción.
El jefe del Ejecutivo defendió que gobernar en un contexto «convulso y complejo» es un «honor» y enumeró las políticas que, según afirmó, justifican su continuidad al frente del Gobierno, como la subida de las pensiones, el salario mínimo o las becas, además de la defensa de los derechos de las mujeres. «Menos mal que gobernamos nosotros», afirmó, insistiendo en que «gobernar es dar la cara» y no «imponer la ley del silencio».
Las declaraciones de Sánchez llegaron tras una intensa ofensiva del Partido Popular durante la semana. La vicesecretaria de Regeneración Institucional del PP, Cuca Gamarra, acusó al Gobierno y a sus socios de sostener una situación «insostenible» por la acumulación de causas de corrupción y denuncias de acoso sexual, denunciando que se ha «encubierto a los acosadores mientras se aislaba a las víctimas» y advirtiendo de que el Ejecutivo «no va a poder huir ni de la justicia ni de las urnas».