Pedro Sánchez y Teresa Ribera comparten una campaña contra la fresa de Huelva

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se han hecho eco en las últimas horas por redes sociales de una campaña puesta en marcha por la asociación alemana Campact para exigir a las cadenas de supermercados de Alemania que dejen de vender fresas procedentes de España para no contribuir a la desecación del Parque Nacional de Doñana.

«El negacionismo arruina nuestro medioambiente y corre el riesgo de arruinar las economías locales. Salvemos Doñana», manifestó ayer Sánchez. El objetivo del mensaje del presidente del Gobierno lo dejó claro previamente la ministra Ribera con el suyo: «Alerta entre los consumidores alemanes que amenazan con un boicot a las fresas españolas. Es imprescindible despejar ya cualquier duda: Juanma Moreno debe retirar de inmediato la ley de regadíos que amenaza Doñana».

Tras el mensaje de Sánchez, el presidente de la Junta de Andalucía salió al paso de la difusión de la campaña contra los frutos rojos andaluces: «La manipulación se les ha ido de las manos. Hablar mal de Andalucía y sus agricultores en Europa tiene estas consecuencias. Están jugando con el pan de miles de familias. Doñana se salva con más compromiso y menos demagogia. ¡Ya está bien!».

Este miércoles, el consejero de Medio Ambiente y portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, ha criticado la actitud «irresponsable y demencial» del Gobierno de España con el sector de la fresa y los frutos rojos de Huelva al «dar cabida a bulos» sobre la proposición de ley de regadíos y «ponerse del lado de los que atacan Huelva».

«Saben que la proposición de ley no ataca a Doñana, pero siguen empeñados en una estrategia que consiste exclusivamente en atacar a Huelva y Andalucía, y hablar mal de un sector que supone el sustento de tantas familias», ha añadido Fernández-Pacheco, quien, en este sentido, ha asegurado que el Gobierno andaluz defenderá Huelva «a capa y espada, haciéndolo además compatible con la conservación de Doñana».

El consejero de Medio Ambiente ha remarcado que la fresa de Huelva «no es el enemigo, sino el medio de vida de cientos de familias», y ha sostenido igualmente que «la actitud de Sánchez desvía el mensaje de los realmente importante: paliar la sequía desde las administraciones, poniendo así freno a la principal amenaza de los ecosistemas y la economía».

Del mismo modo, desde el Parlamento andaluz, el portavoz de Vox en Andalucía, Manuel Gavira, ha reprochado a Pedro Sánchez y Teresa Ribera que justifiquen los ataques a la fresa de Huelva, que proceden de asociaciones de consumidores alemanas «vinculadas al Partido Socialdemócrata de Alemania», socios de Sánchez en Europa.

Gavira ha sostenido, además, que las campañas contra el sector de la fresa de Huelva, alentadas por «la falta de escrúpulos de la izquierda y de sus palmeros ecologistas», forman parte de un plan para «cargarse el sector primario de Andalucía», y que, con sus comentarios en redes sociales, «Sánchez vuelve a asestar otra puñalada al sector agrícola del Condado de Huelva».