Cortijo en Las Alcubillas, donde han sido fueron encontrados los cuerpos de dos niñas y su padre
Suceso en Almería
¿Por qué el presunto asesino de las niñas envenenadas no tenía una orden de alejamiento sobre sus hijas?
El subdelegado de Gobierno en Almería confirmó que la madre , de 23 años, estaba incluida en el sistema de protección de la víctimas de violencia de género, (Viogén)
En la madrugada del pasado domingo 17 de marzo Alina Florentina encontró en el municipio almeriense de Las Alcubillas de Alboloduy los cuerpos de sus dos hijas menores de edad, y el de su expareja, Ionel Cristian. El subdelegado de Gobierno en Almería, José María Martín, confirmó que la madre , de 23 años, estaba incluida en el sistema de protección de la víctimas de violencia de género, (Viogén), lo que «es un elemento que hay que considerar en la investigación».
Lugar donde se ha producido el crimen
Igualmente, en el momento del presunto crimen, el hombre contaba con una orden de alejamiento en vigor respecto a la madre de las pequeñas –que se cumplía a través de una pulsera de localización– pero no respecto a la mismas. Sin embargo, tal y como informó El Debate, la mujer se negó a denunciar a su pareja y solicitó el levantamiento de las medidas cautelares en varias ocasiones; y a pesar de ello, el Juzgado continuó con la causa a petición de la Fiscalía, por lo que el hombre tenía señalado un juicio por malos tratos para el día 10 abril.
VioGén, según el propio Ejecutivo, «es un sistema policial centralizado en el Ministerio del Interior, destinado al seguimiento y protección de las mujeres víctimas de violencia de género y de sus hijos e hijas en cualquier parte del territorio nacional». «Recoge toda la información policial sobre víctimas de violencia de género procedente de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: Policía Nacional, Guardia Civil, policías municipales y cuerpos autonómicos», agrega la Moncloa en un comunicado del pasado mes de mayo.
Las órdenes de alejamiento
A pesar de que el sistema VioGén controla a los hijos de víctimas de violencia de género, las órdenes de alejamiento son medidas cautelares, y por ende reguladas en el Código Penal; que define como «la prohibición de aproximarse a la víctima, o a aquellos de sus familiares u otras personas que determine el juez o tribunal, impide al penado acercarse a ellos, en cualquier lugar donde se encuentren».
En consecuencia, debe ser un magistrado el que imponga la orden de alejamiento para los descendientes de una persona que es víctima de violencia de género. De hecho, el artículo 158.6 del Código Civil recoge que «el Juez, de oficio o a instancia del propio hijo, de cualquier pariente o del Ministerio Fiscal, dictará la suspensión cautelar en el ejercicio de la patria potestad y/o en el ejercicio de la guarda y custodia, la suspensión cautelar del régimen de visitas y comunicaciones establecidos en resolución judicial o convenio judicialmente aprobado y, en general, las demás disposiciones que considere oportunas, a fin de apartar al menor de un peligro».
Así las cosas, en este caso el juez competente no dictó la suspensión del régimen de visitas y comunicaciones del padre respecto a sus hijas, por lo que el presunto asesino pudo cometer el crimen sin que llamara la atención de las autoridades competentes.
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