El ministro de Transportes, Óscar Puente, en una visita a la estación de autobuses de Valladolid, para exigir su reforma
El PSOE le pone palos en las ruedas a la reforma de la estación de autobuses de Valladolid tras años exigiéndola
Tanto durante el mandato de Óscar Puente como en los dos años que llevan en la oposición en el Ayuntamiento, los socialistas demandaban a la Junta unas obras por las que ahora piden explicaciones tras una investigación de la Fiscalía
«El PSOE urge a la Junta de Castilla y León para que invierta en la mejora de la estación de autobuses», titulaba el PSOE una nota de prensa de hace dos años, con un Óscar Puente que acababa de perder la Alcaldía de Valladolid. De ese tiempo a esta parte, los socialistas, desde la oposición, han venido reclamando a la Junta de Castilla y León unas obras que renueven la infraestructura de titularidad autonómica.
Las obras ya han comenzado, con un presupuesto de unos 4,8 millones de euros, para darle un lavado de cara más que necesario a la terminal, operativa desde 1972 y con un estado en el que los calificativos de «viejo» o «deteriorado» se quedan muy cortos. Todo iba viento en popa hasta que un nuevo partido político, Adelante Valladolid, presentó una denuncia, el pasado 27 de mayo, sobre las obras, ejecutadas por la Junta a través de Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl) y que cuentan con la licencia otorgada por el Ayuntamiento de Valladolid; ambas instituciones gobernadas por el PP.
Esta semana se conocía que la Fiscalía había abierto una investigación sobre la legalidad de los trabajos. Desde la Junta, su portavoz, el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, salía al paso señalando que el Ministerio Público tiene la «obligación» de investigar al presentarse una denuncia, si bien algunas informaciones apuntan que se trata de una actuación de oficio. En todo caso, este hecho le ha servido al PSOE para ponerle palos en las ruedas a unas obras que venía exigiendo desde hace tiempo.
Este jueves, el Grupo Parlamentario Socialista registraba en las Cortes de Castilla y León la solicitud de comparecencia del consejero de Movilidad y Transformación Digital del Gobierno autonómico, José Luis Sanz Merino, «a fin de que de que informe acerca de Investigación de oficio abierta por la Fiscalía Delegada de Medio Ambiente y Urbanismo para determinar la legalidad de la obra de la Estación de Autobuses de Valladolid», según apuntaba la formación en un comunicado.
La procuradora socialista Laura Pelegrina, en las Cortes de Castilla y León
La portavoz socialista de Movilidad y Transformación Digital, Laura Pelegrina, indicaba que la comparecencia del consejero es «obligada» después de que el pasado martes agentes del Seprona se personaran en la estación de autobuses de Valladolid, para , a petición de la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo, requerir documentación sobre la obra. «Además de explicaciones, exigimos al consejero total transparencia acerca de la posible legalidad o ilegalidad de las obras que se están realizando en la estación de autobuses de Valladolid», recalcaba Pelegrina.
Plazo de ejecución de 18 meses
Si nada lo impide, las obras de renovación de la estación de autobuses de Valladolid, que tienen un plazo de ejecución de 18 meses, se ejecutarán en tres fases diferenciadas para mantener la actividad de las distintas empresas de transporte, pero también de los nueve negocios existentes, para generar el menor número de molestias a los usuarios. Todo ello con la previsión de que los trabajos estén terminados a finales de septiembre o principios de octubre de 2026.
Estado actual de la estación de autobuses de Valladolid
La terminal, operativa desde el año 1972 y de titularidad autonómica desde 2014, supera los cinco millones de viajeros y los 230.000 expedientes anuales. La reforma, impulsada por la empresa pública Somacyl, corre a cargo de la unión temporal de empresas formada por Collosa y Pavasal, a la que se adjudicó por 4,8 millones.
A esta cantidad se une la dirección técnica de las obras, prevista en la redacción del proyecto, por lo que se superan los cinco millones de euros. El acta de replanteo se firmó el pasado 11 de abril, según adelantó Ical, por lo que a finales de abril, de acuerdo a la previsto, comenzaron los primeros trabajos.
Los trabajos ya han comenzado en esta primera fase, por lo que se han ocupado las cuatro primeras dársenas para acopios de material de obras y residuos en la zona próxima a la calle Gabilondo y se han instalado casetas de obras y otras dependencias para acometer la obra en año y medio.
Recreación de la estación de autobuses de Valladolid una vez remodelada
También se ha perimetrado la zona del vestíbulo central, que hasta ahora acogía las taquillas de venta de billetes, para dotarla de un lucernario. Además, se van a trasladar los locales comerciales afectados a otros vacíos y se han redistribuido las taquillas y zonas de conteo a la parte del paseo Arco de Ladrillo y a los despachos libres, tras demoler el cuerpo de taquillas actuales.
También, se van a adecuar las siete últimas dársenas para disponer después de ellas y comenzará en esta primera instancia la intervención en la cubierta de esta zona exterior. El acceso de viajeros puede realizarse tanto por la calle San José como por el Puente Colgante.
En la segunda fase, la puerta de Puente Colgante se convertirá en entrada única y se ocuparán otras 14 dársenas para adecuarlas, pero ya estarán lista las siete últimas, además de las iniciales, y se habilitarán los nuevos aseos. Como recoge Ical, en la última, se procederá a la demolición del cuerpo añadido a la carnicería-charcutería y se rematarán los locales para proceder a su realojo definitivo.
Finalmente, se adecuará la zona de taquillas, el ascensor para subir a la primera planta y se instalarán los sistemas de automatización e información al viajero, así como las canalizaciones, antes de proceder a la pavimentación del patio de autobuses.