Sistema de armas de nueva generación (NGWS) de FCAS, con el caza de nueva generación, Eurofighter y operadores remotos
Ejército del Aire y del Espacio España lanza los contratos para desarrollar el futuro sistema de combate aéreo y su armamento hasta 2031
El Future Combat Air System (FCAS) es un proyecto de gran envergadura cuyo objetivo es desarrollar un sistema aéreo de combate del futuro. Concebido como una red interconectada de plataformas, sensores y armas, su objetivo no es crear únicamente un nuevo avión de combate, sino un ecosistema operativo completo que integre aeronaves tripuladas, drones, satélites y sistemas de mando en un entorno común.
España, Francia y Alemania lideran el programa, con la participación de sus principales industrias de defensa: Airbus Defence & Space, Dassault Aviation e Indra. El objetivo común es lograr que el FCAS esté plenamente operativo hacia 2040, consolidando la soberanía tecnológica europea en el ámbito aeroespacial.
En este camino se ha dado un paso muy importante: el Consejo de Ministros ha autorizado la celebración de dos contratos clave destinados a impulsar el Programa Sistema Integral Aéreo de Última Generación, en una decisión que abre la vía al diseño y la experimentación de las capacidades aéreas y de armamento que España pretende incorporar en el medio y largo plazo. Los acuerdos, con vigencia hasta el 30 de noviembre de 2031 y sin posibilidad de prórroga, cubren el desarrollo del concepto del Future Combat Air System (FCAS) nacional y la maduración tecnológica del Next Generation Weapon System (NGWS).
Así funcionará el FCAS
En términos generales, el primer contrato tiene por objeto desarrollar el concepto del denominado «Future Combat Air System (FCAS) nacional», realizar experimentación sobre ese concepto e identificar su alcance inicial. Según el Ejecutivo, esos trabajos permitirán sentar las bases para que futuras operaciones militares se efectúen «desde el ámbito aeroespacial», esto es, integrando capacidades que conecten plataformas, sensores y efectos en un entorno híbrido entre aire y espacio.
Demostradores tecnológicos
El segundo contrato, complementario, se centra en el desarrollo de demostradores tecnológicos y en actividades de demostración orientadas a la maduración de tecnologías aplicables al programa Next Generation Weapon System (NGWS). El propósito declarado de este paquete es facilitar la obtención de capacidades militares futuras para las Fuerzas Armadas en el ámbito aeroespacial, mediante el ensayo y la validación de componentes y conceptos que podrían luego integrarse en sistemas operativos.
Ambos contratos comparten el mismo horizonte temporal: entrarán en vigor desde su formalización hasta el 30 de noviembre de 2031, sin opción de prórroga. Esa fijación temporal, según fuentes del Gobierno, obedece a la necesidad de establecer marcos de trabajo con calendarios claros para la fase de diseño y pruebas, manteniendo una planificación que permita evaluar avances tecnológicos antes de acometer compromisos industriales o de adquisición a mayor escala.
Simulación del funcionamiento del FCAs, interconectado a la nube de combate
Los trabajos previstos integran fases de investigación aplicada, desarrollo de demostradores y experimentación operativa. En el caso del FCAS nacional, la fase inicial se centrará en definir arquitecturas, interoperabilidad y conceptos de empleo que permitan operar de forma integrada «desde el ámbito aeroespacial», con un enfoque en prestaciones de vigilancia, comando, control y empleo de efectos. Para el NGWS, la atención se dirige a tecnologías de armas de nueva generación, que incluyen demostradores para validar prestaciones, seguridad y compatibilidad con los entornos de operación previstos.
La autorización de estos contratos forma parte de la estrategia del Ministerio de Defensa para garantizar la autonomía tecnológica y operativa a medio y largo plazo. Fuentes gubernamentales han recalcado que la iniciativa no se limita a un ejercicio teórico, sino que incorpora experimentación y demostración para acelerar la maduración de tecnologías críticas. Asimismo, la articulación de ambos programas busca generar sinergias entre el desarrollo de la plataforma (FCAS) y el armamento que deberá integrarse en ella (NGWS).
La decisión del Consejo de Ministros llega en un momento en el que numerosos países europeos y socios estratégicos están impulsando programas equivalentes para modernizar sus capacidades aéreas y aeroespaciales. El Gobierno subraya que el objetivo es garantizar que las futuras operaciones militares españolas puedan apoyarse en sistemas avanzados, interoperables y alineados con las necesidades operativas definidas por las Fuerzas Armadas.
Entre las implicaciones prácticas de estos contratos están la activación de procesos de colaboración con la industria de defensa, centros de investigación y universidades. Las fases de demostración tecnológica previstas ofrecen, además, oportunidades para que empresas nacionales y consorcios participen en proyectos que podrían desembocar en programas de adquisición posteriores, siempre condicionados a la evaluación técnica y presupuestaria que se realice en los plazos marcados.
Con un plazo de vigencia fijado hasta finales de 2031 y sin opción de prórroga, los contratos suponen un compromiso firme con una hoja de ruta tecnológica y operativa. El Gobierno ha dado así el primer paso formal para traducir en proyectos concretos la ambición de contar con un FCAS y un NGWS adaptados a las exigencias del entorno operativo del futuro, integrando capacidades aeroespaciales y de armamento de nueva generación.