(Imagen de archivo de un temporal en Galicia)
El huracán Gabrielle apunta a Galicia
El fenómeno meteorológico podría llegar a la comunidad autónoma este fin de semana en forma de borrasca
El sol brilla en Galicia como si continuase instalado el verano, aunque desde este lunes haya comenzado de forma oficial el otoño. Pero esta situación de relativa calma cambiará de forma drástica este próximo fin de semana con la posible llegada del huracán Gabrielle.
Se espera que ya convertido en borrasca llegue a Galicia el próximo sábado y domingo. Es la trayectoria que todos los expertos creen que tomará aunque, por el momento, aún no está confirmado. «Gabrielle ha sido la séptima tormenta tropical y el segundo huracán de la temporada de huracanes del Atlántico de 2025», explica el meteorólogo Francisco Martín León y añade: «Podría pasar por Azores y, posteriormente y a finales de mes, podría acercarse a la península ibérica. Algunos modelos lo llevan al oeste de Galicia y otros al oeste de Irlanda, todos como borrasca ex-Gabrielle».
«En estos momentos la mayoría de los escenarios acercan a exGabrielle al noroeste peninsular de cara al fin de semana, en principio como borrasca, pero no podemos descartar del todo que mantenga algún rasgo tropical. En todo caso, sus efectos serían similares a los de las depresiones atlánticas, con viento y temporal de mar en el norte y algunas precipitaciones», apunta Samuel Biener, de Meteored.
Últimos días de sol
A la espera de que se confirme o no su paso, los gallegos tendrán todavía la oportunidad de disfrutar de unos días de sol con los que poder pasar unas horas en la playa, alargando así la temporada estival.
Eso sí, las temperaturas máximas y mínimas no serán las mismas que las del mes de agosto cuando Galicia sufrió una intensa ola de calor. De hecho, este verano ha sido el más cálido y seco de su historia con una temperatura media de 21 grados, dos grados por encima de lo habitual, según el informe de MeteoGalicia.
El mes de junio fue especialmente extremo, con una temperatura media de 20,5 °C, la más alta desde 1961. La temperatura mínima se elevó 2,6 grados sobre lo normal, marcando el registro más cálido de la serie histórica, mientras que la máxima alcanzó 3 grados por encima de lo habitual, situándose como la segunda más alta registrada. Los meses de julio y agosto también se ubicaron por encima de lo esperado, aunque con menor intensidad.