El puente gallego que guarda una leyenda
El rincón gallego con cascadas naturales y un puente histórico imprescindible en tu próxima visita a Galicia
Su patrimonio arquitectónico es uno de los principales atractivos de este municipio
Galicia destaca por su diversidad paisajística y su riqueza cultural. A lo largo y ancho de la región se puede disfrutar de bosques, de la costa y de una cultura popular marcada por leyendas y relatos que forman parte del folclore local.
En sus numerosos rincones, es común encontrar ríos que atraviesan terrenos rocosos, puentes antiguos y construcciones históricas que reflejan siglos de historia. Este en particular destaca por su cascada natural y un puente que está vinculado a una leyenda.
Entorno natural y patrimonio histórico
Uno de estos lugares emblemáticos es el municipio de Negreira, en la provincia de La Coruña. Esta localidad con sus 18 parroquias reúne un entorno natural destacado junto con un patrimonio histórico de gran valor.
Negreira está atravesada por el río Tambre, cuyas aguas forman una serie de cascadas y pozas que durante los meses estivales ofrecen un espacio de recreo.
Pero además, la historia de Negreira tiene sus raíces en la época romana, aunque fue durante la Edad Media cuando el territorio enfrentó episodios significativos, como el ataque de piratas normandos en el año 979.
Aunque gran parte del pasado antiguo no se conserva físicamente, el municipio cuenta con elementos históricos que perduran hoy en día como el puente medieval de Puente Maceira, situado en la parroquia de Portor.
Esta estructura, construida en granito, aprovecha los pilares de un antiguo puente romano, evidenciando su larga continuidad histórica. Además de su valor arquitectónico, el puente está vinculado a una leyenda que relata cómo, según se cuenta, los discípulos del apóstol Santiago lograron cruzar el río mientras huían de sus perseguidores romanos, y poco después el puente se derrumbó, deteniendo a quienes les perseguían.
Pazos, ermitas y legado cultural
Pero el patrimonio arquitectónico de Negreira no acaba ahí, sino que incluye diversas edificaciones como los tradicionales pazos y ermitas. El Pazo do Cotón, conectado con la Capilla de San Mauro, en donde se puede observar un retablo neogótico en un entorno rural.
Otros edificios relevantes son el Pazo de Albariña, con su torre y jardines, y la Casa de la Torre en Bugallido, que tuvo relación con la Orden de los Hospitalarios de Jerusalén.
Estas construcciones forman parte de la identidad cultural del municipio y se relacionan con tradiciones y celebraciones locales. La Feria de lo Románico, que se celebra cada mes septiembre y es una iniciativa que permite a vecinos y visitantes acercarse a la historia medieval de la zona.
Negreira, ya sea por su papel en el Camino de Santiago, su patrimonio histórico o su entorno natural, atrae a quienes buscan descubrir rincones que escapan al turismo convencional.